La Unión de Consumidores de Alicante (UCE) denuncia que el retraso en la entrega de pisos es un truco que emplean algunas constructoras para especular con las viviendas y poder recomprarlas a los propietarios y sacar más beneficios de ellas.
El presidente de los consumidores alicantinos, Pedro Hernández, puntualiza que, ante el retraso en la entrega de pisos, algunas constructoras ofrecen la posibilidad de devolver el dinero a los propietarios y, una vez adquirida la vivienda, la venden a un precio superior al que se puso en el mercado inicialmente.
Hernández reconoce que esta práctica es habitual en el panorama de las nuevas construcciones, aunque agregó que los propietarios prefieren esperar antes que iniciar los trámites de una nueva adquisición, por lo que al final se conforman con los retrasos de los constructores. Las excusas de la demora suelen relacionarse con factores externos a la construcción (como una huelga de operarios o problemas con el suelo) para acogerse a la ley y conseguir que la Administración no intervenga o les obligue a acelerar la obra con más trabajadores o pagar por los daños.
Años atrás la práctica de los compradores era esperar al último momento para adquirir la vivienda más barata, pero ahora resulta más económica cuando aún no han comenzado ni a allanar el terreno. Estos problemas sólo suceden en la venta libre, porque en los pisos de protección oficial, el precio está controlado y no se permiten trucos de retraso, salvo los que estén justificados por fuerza mayor.
Por otro lado, el presidente de UCE Alicante recomienda revisar la vivienda nueva de arriba abajo para buscar posibles imperfecciones desde el principio y no tras meses de residencia que podrían ser achacados a un mal mantenimiento.
Las puertas que no abren bien, ventanas que no ajustan, desconchones, humedades, pintura mal trabajada o suelos desnivelados y con juntas de separación son algunas de las deficiencias más comunes en las casas nuevas.
