El ranking de los países que más empleo destruyen de la Unión Europea (UE) sigue teniendo a España entre los primeros puestos. Así, y según los datos de la oficina de estadística comunitaria, Eurostat, nuestro país volvió a ser durante el primer trimestre del año el segundo Estado miembro de la UE que más trabajo eliminó, sólo con Lituania por delante.
En el conjunto de la UE se destruyeron 1.916.000 empleos entre enero y marzo
Las cifras aportadas por Eurostat indican que España registró un descenso del empleo del 3,1% en el primer trimestre con respecto al trimestre anterior y del 6,4% en términos interanuales, es decir, si se compara con el primer trimestre del pasado año.
En el conjunto de la UE se destruyeron 1.916.000 empleos entre enero y marzo, mientras que el número de personas con trabajo en los países del euro disminuyó en 1.220.000.
Los datos de Eurostat ponen de manifiesto que la destrucción de empleo se intensificó en el primer trimestre del año en la UE y en la eurozona, con una caída del 0,8%. En este periodo había en la UE 223,8 millones de personas con trabajo, de los que 146,2 millones corresponden al área de la moneda única.
Cumbre por el empleo
Por otro lado, ayer arrancó en Ginebra la Cumbre Mundial por el Empleo, a la que asisten jefes de Estado y de Gobierno de varios países. Este encuentro, que durará hasta el miércoles, pondrá sobre la mesa un abanico de medidas y políticas para la recuperación económica y del empleo.
En la inauguración, el director general de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), Juan Somavia, recordó que «el mundo no puede permitirse el lujo de que no vuelva la creación de empleo hasta varios años después de que comience la recuperación económica».
La OIT calcula que entre 39 y 59 millones de personas más perderán sus empleos este año
Somavia instó a los responsables de los gobiernos mundiales a ponerse de acuerdo para alcanzar pactos por el empleo tanto a nivel nacional como regional y global, políticas que «pongan a la persona en el centro» del interés y basadas en el diálogo y la protección social.
La OIT estima que la recuperación del empleo necesita entre cuatro y cinco años más que la del crecimiento económico, por lo que calcula que, si no se adoptan medidas, la crisis del desempleo puede extenderse todavía ocho años más.
Sus previsiones pasan por que entre 39 y 59 millones de personas más perderán sus empleos este año, hasta alcanzarse 239 millones de desempleados globales. Y sólo con los 45 millones de nuevas incorporaciones de jóvenes al mercado laboral cada año, se necesitarían crear 300 millones de puestos hasta 2015 para absorber esta mano de obra.