La industria discográfica reclamó ayer en Bruselas la reducción del IVA aplicado a los discos del 16% al 4%, tal y como ocurre ya con los libros, periódicos y revistas, y demás productos culturales gracias a su calificación como bienes o servicios de interés cultural para la Unión Europea (UE). Los discos, por contra, se gravan con un tipo normal de IVA que asciende en algunos países hasta el 25% (en España, el 16%).
La directora para Europa de la Federación Fonográfica Internacional, Frances Moore, presentó ayer una plataforma constituida por productores, editores, distribuidores y artistas musicales, expresamente creada para pedir a la Comisión Europea una reducción de este impuesto.
La piratería, la oferta gratuita en Internet y el fin del proceso de sustitución de los discos de vinilo está reduciendo los márgenes de la industria y pone en duda su futuro. De hecho, según datos de la Federación, las ventas mundiales cayeron desde los 4,1 millones de unidades en 1997 a 3,3 millones el año pasado.
El sector considera que la reducción del IVA puede frenar significativamente la piratería e incrementar las ventas hasta un 40% en tres años, porque permitiría situar el precio por debajo de los 15 euros, «umbral psicológico por debajo del cual se dispara la propensión a comprar», afirma el Gobierno francés, firme partidario de la iniciativa.
Todos los representantes de la cadena de producción y distribución se comprometieron ayer a pasar intacto al cliente final el margen de la rebaja que concedan los Gobiernos. La pérdida de interés por las copias piratas que presumiblemente implicaría esta medida, compensaría de sobra la merma de ingresos para el fisco, afirman.
