El Juzgado de Primera Instancia número 16 de Valencia ha condenado a Bankinter a devolver a una clienta 3.955 euros que le fueron cargados indebidamente en su cuenta por disposiciones fraudulentas realizadas mediante la clonación de su tarjeta de crédito.
Según la sentencia, la entidad bancaria «no controló el correcto funcionamiento del sistema», ni lo protegió «convenientemente» al permitir «la manipulación» de los cajeros automáticos por terceras personas «que quebrantaron y violentaron su seguridad».
Asimismo, subraya que «tampoco vigiló la seguridad del servicio que presta» y por el que la entidad «es remunerada», por lo que Bankinter deberá «responder íntegramente de las consecuencias dañosas para su titular».
El fallo también anula la cláusula de limitación de responsabilidad y la declara «abusiva» por ser «contraria a las exigencias de la buena fe contractual y generadora de un claro e injusto desequilibrio de los derechos y obligaciones asumidas».
