Para informar a los posibles tripulantes de los viajes espaciales privados de todos los aspectos del vuelo, el Gobierno estadounidense ha presentado hoy un texto de 120 páginas en el que se recogen diversos aspectos, como los requisitos médicos previos o el entrenamiento necesario, entre otros.
La publicación recoge que es necesario informar a los participantes, antes de iniciar el viaje, de los riesgos que asumen con esta decisión. Además, los pasajeros también deben aprobar un consentimiento escrito antes de subir a la lanzadera.
Lo cierto es que la legislación aprobada hace un año por el presidente Bush ha contribuido al florecimiento de la industria espacial y ha limitado la acción de la Administración Federal de Aviación (FAA).
«Esto significa que la FAA debe esperar a que exista algún accidente antes de que pueda imponer alguna restricción, incluso ante los daños predecibles. En vez de eso, el Congreso exige que los participantes en el viaje sean informados de los riesgos», afirmó un portavoz del Ejecutivo.