La Junta de Andalucía pondrá en marcha el próximo curso un programa de gratuidad de libros de texto

La implantación del denominado Cheque-Libro beneficiará este año a los alumnos de primero y segundo de Primaria
Por EROSKI Consumer 17 de agosto de 2005

La principal novedad del curso escolar 2005-2006 en Andalucía será la puesta en marcha por parte de la Junta de un programa de gratuidad de libros de texto para la Educación Obligatoria, según informa la Federación Andaluza de Consumidores y Amas de Casa Al-Andalus en un comunicado. Esta asociación valora positivamente la iniciativa, pero considera que tendría que haberse implantado antes y haberse hecho extensiva a un mayor número de cursos desde el primer año.

Al-Andalus explica que se trata de una medida voluntaria, por lo que los padres pueden renunciar simplemente firmando un documento que el propio centro docente les facilitará. Sin embargo, todos aquellos que lo deseen podrán beneficiarse de ella, siempre que se trate de colegios públicos y/o concertados.

Cheque-Libro

El procedimiento para la adquisición de los libros de texto es sencillo. Al-Andalus señala que el propio centro docente entregará un impreso denominado Cheque-Libro, debidamente cumplimentado, que será canjeado por los padres en la librería o establecimiento donde realicen la compra. Allí tendrán que firmar un «recibí» como prueba de la misma, quedándose el comercio con el Cheque-Libro y la factura para su posterior reintegro. Los establecimientos que colaboren en este programa deberán informar de ello a los usuarios con un cartel visible que diga: «Aceptamos como forma de pago para la adquisición de libros de texto el Cheque-Libro emitido por la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía».

La implantación del Cheque-Libro será progresiva, de tal modo que este año sólo podrán beneficiarse de él los alumnos de primero y segundo de Primaria, estando previsto que llegue a todos los cursos de Educación Obligatoria en el ejercicio 2008-2009.

En opinión de Al-Andalus, este modo de implantación «no es el más adecuado» y critica, por un lado, que no se haya hecho antes y, por otro, que no se haya extendido a un mayor número de cursos desde el primer año.

Obligaciones

Los alumnos que se beneficien del programa de gratuidad deben saber que los libros son cedidos en régimen de préstamo y que tendrán que devolverlos en la fecha que lo determine el Consejo Escolar del centro. Debido a ello, el beneficiario tiene que cumplir una serie de obligaciones, como someterse a las actuaciones de comprobación de la Consejería de Educación o del centro en el que cursa estudios, hacer un uso adecuado y cuidadoso de los libros, o reponerlos en caso de extravío o deterioro.

Los libros elegidos no podrán ser sustituidos por otros durante un periodo mínimo de cuatro años y los centros docentes tendrán libertad para elegir el material que consideren oportuno. Para Al-Andalus, esa libertad de elección «es limitada» y «encuentra dificultades para ser efectiva, desde el momento en que debe hacerse dentro de un presupuesto establecido por la Junta».

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