Luís Adolfo Desdentado Gómez (Madrid, 1941) ha dedicado toda su vida profesional a la gestión del medio ambiente en la industria del aluminio hasta su jubilación, en enero del 2002. Ingeniero Agrónomo, Diplomado en Gestión Medioambiental y Master en Evaluación de Impacto Ambiental (EIA), ha participado en varios comités internacionales dedicados a la protección del medio ambiente (EAA, IPAI), así como en la elaboración de normas como representante de su empresa y con el Gobierno Español (OSPARCOM, BREF documents). En la actualidad, forma parte como Vocal de la Asociación Española de Evaluación de Impacto Ambiental, desde la que ofrece una visión de la importancia de su profesión para el medio ambiente y los ciudadanos.
Es una técnica generalizada en todos los países industrializados que introduce la variable ambiental en la toma de decisiones de los proyectos que puedan tener incidencia importante en el medio ambiente. Las EIA están para corregir en el proyecto cualquier parte que pueda impactar sobre la atmósfera, el agua o el suelo, de manera que se adecue a las normas previstas, que han sido elaboradas para que lo permitido por ellas no afecte al medio ambiente ni a la salud de las personas. En cuanto a los evaluadores, en principio son generalmente trabajadores de ingenierías, consulting, etc.
Podríamos decir que sí. Ahora bien, una vez realizado su trabajo, entran en juego los ciudadanos, a través de la información pública, y más tarde la autoridad, que está en la obligación de cumplir y hacer cumplir lo realizado por el evaluador.
La EIA pretende defender el medio ambiente de las posibles agresiones de determinados proyectos que no tengan en cuenta la variable ambientalLa primera razón es clara y valdría como única contestación: Es una norma que pretende defender el medio ambiente de las posibles agresiones de determinados proyectos que no tengan en cuenta en su ejecución la variable ambiental. Añadiría una segunda: En la norma se prevé el trámite de información pública del proyecto para que, en teoría, los ciudadanos puedan hacer alegaciones al mismo.
La sensibilización en los temas medio ambientales es capital. Para ello, es necesaria la educación de nuestros jóvenes en ese sentido: Que sepan que la tierra es única y para todos; que conozcan qué es el desarrollo sostenible del que se habla tanto y lo poco que se practica; que con nuestras prácticas de consumo y eliminación -las dos alas del desarrollo sostenible- todos podemos contribuir a la mejora del medio ambiente; que exijamos a los que nos piden el voto que velen por el medio ambiente y que una vez se lo hayamos dado, vigilemos que cumplan.
Los consumidores debemos exigir a los que nos piden el voto que velen por el medio ambiente y que una vez se lo hayamos dado, vigilemos que cumplanLa sociedad en general tiene cada vez más interés por los temas ambientales. Y aunque lógicamente esa sociedad, a través de sus prácticas de consumo, incide notablemente en el medio ambiente, son los gobernantes y las grandes instituciones empresariales, que a veces tienen más fuerza que los propios gobiernos, los que pueden conducir a situaciones más favorables. Por ejemplo, el cambio climático: Los ciudadanos podemos intentar ahorrar energía, que nuestros coches carburen perfectamente, etc. Pero si los grandes responsables de la emisión de CO2 no cumplen el protocolo de Kyoto y el gobierno no se lo hace cumplir, apaga y vámonos.
Las principales dificultades suelen ser la falta de recursos y las evaluaciones, que tienden a parecerse unas a otras.
Dentro de la UE, el Reino Unido, Holanda y los Países Nórdicos, mientras que España se encuentra en un nivel intermedio. En el resto del mundo cabe destacar EEUU, Canadá, Sudáfrica, Australia y Nueva Zelanda.
Cualquier actividad humana, no solo las que se citan en la ley, mejorará desde el punto de vista de su impacto medioambiental, si anteriormente a su ejecución realiza una EIA, que consecuentemente le guiará con una serie de medidas correctoras y un plan de vigilancia.
La mejora auténtica del medio ambiente no viene dada solamente por las EIA, sino por la ordenación del territorioNo obstante, la mejora auténtica no viene dada solamente por las EIA, sino por la ordenación del territorio. Estas tres últimas palabras las hemos oído todos los españoles desde hace unos cuantos años; tanto el gobierno de la administración central como los de las CCAA tienen algún departamento con ese apellido. No hay más que recorrer el territorio español para observar la implantación de polígonos industriales, urbanizaciones de toda índole, industria de base, industria ganadera, parques de ocio y deportivos. Esperemos que este desaguisado pase a la historia con la aplicación de la ley 9/2006, de evaluación de los efectos de determinados planes y programas en el medio ambiente, y que ha venido a implantar en nuestro país la directiva 2001/42, que hace cinco años fue promulgada por la UE.
La legislación española es la misma que la de todos los países de la UE, y entendemos que como toda norma puede perfeccionarse. Para que sea aprobada una EIA se deben adoptar una serie de medidas correctoras que conllevan un Plan de Vigilancia Medioambiental. Para ello, hacen falta más recursos humanos y materiales en la Administración Pública para que los controles puedan ser efectivos.
Los eurodiputados afirman que en las obras de la M-30 no se han salvaguardado los derechos de los ciudadanosPor un truco de cambio de nombre: La M-30 ha pasado de ser una autopista o autovía, a ser una calle. Los eurodiputados que el pasado mes de junio visitaron las obras han afirmado que “parece claro que no se han salvaguardado los derechos de los ciudadanos.”
Cualquier actividad que cumpla lo estipulado en su correspondiente EIA impactará menos al medio ambiente que otra que siendo potencialmente menos impactante, no lo cumpla. Si quiere nombres de sectores, los que figuran en la ley con la obligación de hacer EIA: Las grandes obras públicas, el sector de la energía, la industria química, las grandes instalaciones ganaderas, las grandes urbanizaciones, etc.
Podríamos dividirlas en varios apartados:
- Legislación: Es urgente la transposición de la Directiva europea sobre planes y programas -ya se ha llevado a cabo la Ley 9/2006- y la actualización del vigente Reglamento de EIA
- Administración: Dotar de más recursos humanos y materiales a la administración
- Procedimiento: Mejorar los canales de difusión para informar a los ciudadanos, que sean más accesibles al público, empleando las nuevas tecnologías
- Estudios: Facilitar el acceso a la información ambiental; aumentar los promotores, sus presupuestos para la elaboración de las EIA; e insistir en la multidisciplinariedad de los redactores de las EIA
