Los Bomberos de la Generalitat de Cataluña lograron estabilizar a las 20:15 horas de la tarde de ayer el incendio declarado en Palma d’Ebre (Tarragona), después de que las llamas arrasaran 176 hectáreas de pino blanco y matojo, según informó la Consejería del Interior.
A esas horas todavía continuaban trabajando en el lugar del incendio, el paraje de Comavaques, un total de 32 dotaciones terrestres, mientras que los medios aéreos -tres aviones de vigilancia y ataque, un helicóptero bombardero, uno de comandancia y otro cedido por la comunidad de Aragón- ya se habían retirado de la zona.
La Dirección General de Emergencias y Seguridad Civil de la Generalitat activó por la tarde el Plan Especial de Emergencias por Incendios Forestales (INFOCAT), que estaba en fase de alerta por los tres fuegos registrados en los términos de Palma d’Ebre, Maials y l’Albi (Lérida).
El fuego de Maials ya está extinguido y ha afectado a cuatro hectáreas de pino blanco y matojo. También en la demarcación de Lérida, se declararon el jueves incendios en Albi, Torrebesses, Castelldans, Espluga Calba y Soriguera. En el primer municipio, el incendio ya está totalmente extinguido, mientras que en el resto estaban ayer en fase de control.
Por último, los fuegos declarados en Vinebre, Riba-Roja d’Ebre y Godall, en la provincia de Tarragona, también están extinguidos, tras afectar a 400 metros cuadrados de matojos, 5.000 metros cuadrados también de matojos, y entre 7 y 8 hectáreas de matojos y algarrobos, en cada caso.