El puente de la Constitución y la Inmaculada ha finalizado con 25 accidentes mortales en las carreteras, en los que han muerto 30 personas, 47 menos que en 2003, año en el que este periodo festivo coincidió en los mismos días, según ha informado la Dirección General de Tráfico (DGT).
Además, esos 25 accidentes, registrados desde las 15:00 horas del viernes hasta las 00:00 horas de ayer, lunes, dejaron 21 heridos, 13 de carácter grave y ocho leves. De los 30 fallecidos, cuatro eran motoristas.
La jornada del lunes fue la más trágica, con 15 muertos en 10 siniestros, en los que también resultaron heridas graves 10 personas y tres leves. El domingo perdieron la vida siete personas, en otros tantos accidentes mortales, que dejaron también un herido grave y otro leve.
El sábado murieron tres personas en tres accidentes que dejaron además otros tres heridos leves; y el viernes, hubo cinco muertos en otros tantos accidentes en los que además resultaron heridas graves dos personas y una leve.
Los dos accidentes más graves del puente se produjeron en lunes en la N-323, provincia de Granada. El primero de ellos se produjo a las 17:30 horas en Vélez de Benaudalla, por la colisión frontolateral de dos vehículos. Fallecieron tres jóvenes de entre 23 y 24 años.
El segundo tuvo lugar en Izbor a las 19:00 horas, también por colisión frontolateral al invadir el carril izquierdo un turismo. En este siniestro fallecieron tres personas de 58, 51 y 16 años.
En lo que va de 2008 se llevan contabilizados 2.061 muertos en las carreteras españolas, que son 516 menos que el año pasado en estas mismas fechas, lo que representa un descenso del 20%.
Como cada año por estas fechas, la Dirección General de Tráfico (DGT) pone en marcha una campaña de control de alcoholemia y de concienciación sobre los efectos del consumo de alcohol sobre la conducción, bajo el lema “No dejes que quien ha bebido conduzca”.
Entre los días 8 y 21 de diciembre los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil intensificarán los controles para prevenir este factor de riesgo que provoca casi el 30% de las víctimas mortales por accidentes de tráfico.
“Una comida de empresa, las cañas después del trabajo, el aperitivo del domingo? hay muchos momentos en los que el consumo de alcohol está incorporado a las relaciones sociales. Y esos momentos se multiplican cuando llega Navidad”, señala la DGT, que recuerda que “es necesario que toda la sociedad se implique en la responsabilidad de que nadie conduzca después de haber bebido. Porque por poco alcohol que se consuma la capacidad al volante se ve afectada”.
Tráfico quiere trasladar el mensaje de que todos somos parte del problema y parte de la solución. “Todos podemos hacer algo para impedirlo. Todos somos responsables de que quien ha bebido no coja el coche. Si conduces no bebas, ni dejes que otros lo hagan”, dice la campaña.
