«Juventud libre de tabaco«. Bajo este lema se celebra el próximo día 31 de mayo, el Día Mundial sin Tabaco, la principal causa evitable de muerte en el mundo y una de las enfermedades crónicas adictivas más frecuentes en España. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recuerda que es el único producto de consumo legal que mata entre un tercio y la mitad de sus consumidores.
En esta ocasión, el Día Mundial sin Tabaco pone sus ojos en los más jóvenes. Según los datos de la OMS, la mayoría de las personas comienzan a fumar antes de los 18 años de edad. La cuarta parte de este grupo empieza antes de los 10 años. «Cuanto menor es la edad en que se prueba el tabaco por primera vez, más probable es que la persona se transforme en un consumidor regular, y menos probable que pueda dejar el consumo», afirma la organización sanitaria, que alerta de que la industria tabacalera está intensificando sus esfuerzos para captar a la juventud.
Y es que los jóvenes son potenciales consumidores de tabaco de por vida. «La nicotina es un producto altamente adictivo, y su experimentación durante la niñez y la adolescencia puede llevar fácilmente a toda una vida de dependencia al tabaco», subraya la OMS.
Prohibir la publicidad
Para evitar que la juventud caiga en este pernicioso hábito, la agencia de la ONU aboga por prohibir todas las formas de publicidad directa e indirecta de cigarrillos, incluyendo la promoción de los productos de tabaco y el patrocinio por parte de la industria tabacalera de cualquier tipo de eventos o actividades.
«Está comprobado que tanto la exposición directa como indirecta a la publicidad del tabaco, junto con otras estrategias de marketing empleadas por la industria tabacalera, incita a los jóvenes a probar el tabaco por primera vez, aumentando las probabilidades de convertirlos en consumidores habituales», explica la organización.
En la actualidad, pese a las prohibiciones que en este sentido abundan en muchos países, la OMS afirma que la industria tabacalera sigue gastando cada año decenas de miles de millones de euros en la introducción de sus productos en el mercado por todo tipo de medios.
Espacios sin humo
Por otro lado, una encuesta de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC) revela que el 72,2% de los españoles apoya los espacios públicos sin humo y considera que esta opción ayuda a los fumadores a abandonar el hábito. Además, una inmensa mayoría de los ciudadanos (el 95%) es consciente de que el humo ambiental puede perjudicar la salud de los no fumadores.
La encuesta constata que el 67% de los menores de 25 años está expuesto más de una hora al humo ambiental del tabaco durante el fin de semana. De ellos, un 35,7% cree que donde más tiempo está expuesto a la humareda de los cigarrillos es en las cafeterías. La semFYC calcula que en España mueren al año por tabaquismo activo más de 54.000 personas y por el pasivo, más de 6.300.