Endocrinos elaboran una guía sobre fármacos para la obesidad de eficacia no reconocida

Alertan de las llamadas pastillas para adelgazar, que pueden tener efectos mortales
Por EROSKI Consumer 9 de noviembre de 2002

La Sociedad Española de Endocrinología está elaborando una guía sobre medicamentos para la obesidad de eficacia no demostrada científicamente, incluidos los llamados «productos milagro», y donde se comprobarán la composición y efectos de éstos con vistas a informar a los propios profesionales endocrinos.

Así lo anunció ayer la vicepresidenta de la Sociedad Andaluza de Endocrinología y Nutrición (SAEN), Elena Torres Vela, durante el 28 congreso de esta entidad que se celebra estos días en Jaén y en él que participan unos 200 especialistas de toda Andalucía, así como de provincias como Madrid, Barcelona o Salamanca.

Junto con esta guía se está elaborando un decálogo de la obesidad, dirigido a los pacientes, donde se define tal dolencia crónica y los factores que favorecen la no aparición de esta patología, y se alerta de los remedios milagrosos, añadió Torres.

En este sentido, desde la SAEN advierten de las llamadas pastillas para adelgazar, que pueden tener consecuencias mortales en situaciones extremas, pues en la mayoría de los casos tienen compuestos de anfetaminas y de otras sustancias nocivas, y además han sido denunciadas por Naciones Unidas.

En España, actualmente, el mercado en torno al adelgazamiento y la dietética mueve más de 42,07 millones de euros al año, de los que la mayor parte está en manos de los productos homeopáticos y de herbolario (57,7%), seguido de las «píldoras milagrosas» con un 18,5%, sustitutivo de la comida (13,3%), laxantes (9,2%) y, por último, los medicamentos de prescripción, con un 3,33%.

Alfonso Calaña, miembro del Servicio de Endocrinología del Hospital Reina Sofía de Córdoba, abogó por aumentar la formación y concienciación sobre la obesidad en los ámbitos educativo y sanitario, «pues el componente preventivo es muy importante», a lo que agregó que «las autoridades sanitarias no son conscientes del coste social y laboral que puede suponer esta enfermedad, y ya se están dando casos en los que no se contrata a una persona por exceso de peso».

Por su parte, el jefe del servicio de Endocrinología Pediátrica del Hospital Niño Jesús de Madrid, Jesús Argente, lamentó la escasez de unidades multidisciplinares en España «que integren todos los aspectos para un tratamiento global de la obesidad, lo que provoca una concentración de pacientes en determinados hospitales con tales grupos de trabajo, cuando lo ideal sería combinarlos con el tratamiento ambulatorio».

Argente recordó que la anorexia y la bulimia «son enfermedades que se conocen desde el siglo XIV, aunque han sufrido repuntes y disminuciones». En este aspecto, comentó que tras tres años en aumento máximo, estas patologías están experimentando ahora un descenso paulatino, excepto en los casos de varones y pacientes pre-adolescentes, donde está aumentando.

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