Fotodepilación

Una opción cada vez más demandada por hombres y mujeres
Por Miren Rodríguez 24 de junio de 2003

Cera, pinzas, cuchillas, cremas y aparatos eléctricos han protagonizado hasta nuestros días el ritual al que, hasta hace muy poco, sólo se enfrentaban las mujeres para eliminar el vello. Frente a estas prácticas, el uso de nuevas técnicas como la fotodepilación atraen a hombres y mujeres a través de un eslogan tradicionalmente soñado: “depilación duradera, un sistema cómodo, rápido e indoloro”. ¿Es cierto que a través de un método como éste, similar al del rayo láser, el pelo desaparece para siempre? Antes de someterse a un tratamiento de estas características sepa que su efectividad depende de las características personales de cada paciente, determinantes en los resultados finales. Conozca las ventajas e inconvenientes de la fotodepilación, así como las precauciones que debe tomar antes de ponerse en manos de un médico especialista.

¿Depilación definitiva?

No hay duda. Diferentes especialistas en distintas técnicas depilatorias coinciden en alabar un sistema basado en una serie de aplicaciones de luz sobre la piel: la fotodepilación. “Este sistema permite olvidarte de la depilación, porque destruye el folículo piloso y por esta razón es muy difícil que se vuelva a regenerar. Es muy improbable que el pelo nazca de nuevo, sólo sucederá excepcionalmente, en cuyo caso y pasado el tiempo, los estudios constatan una considerable disminución de la densidad de la zona tratada y unos folículos de diámetro muy inferior a los existentes antes del tratamiento”, explica el doctor Fernando Blanco, director del área de medicina estética de Corporación Dermoestética.

Desde las oficinas de consumidores se demanda que, tal y como reconocen los médicos especializados en medicina estética cuando el cliente acude a sus centros, hagan público en sus cuñas y anuncios publicitarios que la fotodepilación no es efectiva en un 100% de los casos. Calificativos como “permanente” y “definitivo” deberían sustituirse por otros como “elevado porcentaje de efectividad total”, sin generalizar, matizan.

La dermatóloga del Hospital de Guadalajara, Rosa del Río, defiende la fotodepilación como el mejor sistema para eliminar y reducir el vello de todos los que se comercializan en estos momentos. De la misma opinión que ella, el doctor Jaén, jefe del servicio de dermatología del Hospital Ramón y Cajal explica que, a través de este sistema, la piel mejora ante la aparición de folículos; en aquellos casos en que el vello no crece como debe y aparece un grano que se puede llegar a infectar.

La doctora del Río señala que los peores resultados de la fotodepilación, según lo que ha podido observar en más de seis años, tienen lugar en las zonas tratadas en la cara. También, apunta, “muchas de las personas que se tratan no han acabado de desarrollarse y este hecho puede provocar alteraciones hormonales”.

Desde que las mujeres del antiguo Egipto se depilaban con una receta con sangre de animal, mezclada con cenizas y minerales cobrizos, los ungüentos y estrategias no han cesado. Las mujeres judías se depilaban mediante un hilo con el que formaban un triángulo y la preocupación de la mujer romana por mostrarse ante los hombres sin un solo pelo hizo que un médico de Roma ideara una fórmula de arsénico mezclado con fino polvo perfumado para su eliminación.

Estos son algunos precedentes de lo que se ha convertido en un excelente negocio para clínicas, salones de belleza y centros especializados en medicina estética. Y no es de extrañar, dada la creciente demanda, no sólo de mujeres, por probar nuevas técnicas. Los hombres no disimulan su preocupación por mantenerse apuestos y acudir a centros especializados para eliminar el pelo en zonas muy concretas, “sobre todo en brazos, pecho y espalda”, aseguran desde este centro especializado en estética.

Mientras que los responsables de las clínicas en las que se practica la fotodepilación aseguran que la presencia de hombres es tan habitual que pasa prácticamente desapercibida, su paso por otros salones en los que se trabaja con otras modalidades depilatorias- como puede ser la cera fría o a través de toallitas indoloras- es anecdótico. “No es frecuente ver a hombres por aquí, únicamente algún ciclista de vez en cuando y, por lo general, se compran una crema de fácil aplicación para que se la extiendan cómodamente en su casa”, comenta María P. de Benito, responsable del salón Lu, con más de 10 años de experiencia.

En el caso de las mujeres -explica el doctor Blanco- las partes más solicitadas para tratarse a través de la fotodepilación son:

  • Piernas y muslos
  • Brazos y axilas
  • Región pubiana
  • Labio superior

La fotodepilación paso a paso

  • Una vez que la decisión esté tomada y se haya decidido por probar este sistema que, aunque más caro, puede resultar también más práctico, dado que en unas cuantas sesiones “el vello será historia”, infórmese sobre la legalidad de la clínica elegida, así como de la titulación de su personal. La fotodepilación es un tratamiento médico y se debe realizar por y con la supervisión de un médico.
  • El especialista le explicará el tipo de piel y de vello que tiene, y en función de sus características decidirá las sesiones previstas para su desaparición. Por lo general, se suelen recibir una media de 5 sesiones espaciadas de uno a tres meses. “Aunque las sesiones dependen de las características del mismo y de la zona a tratar”, explican desde Coporación Dermoestética. “En principio, cualquier tipo de vello y de piel puede ser tratada, auque los resultados son más efectivos en las personas con piel clara y pelo oscuro”, explican desde el centro Estelitismo, especializado en esta técnica. “Los expertos conocedores de la tecnología láser pueden adaptar los parámetros de longitud de onda, de intensidad y duración del puesto dependiendo de cada paciente”, añaden.
  • Una vez seleccionada la parte concreta, el profesional aplicará un gel sobre la zona exacta a modo de anestésico, de esta manera el frío previene las posibles irritaciones.
  • A partir de este momento, el profesional, protegido con gafas especiales para evitar daños en los ojos, destruirá los folículos pilosos a través del flash de luz intensa emitida por un filtro de cuarzo. Esto no significa, aunque lo pueda parecer, que el pelo se elimine de uno en uno, sino por zonas. “La energía lumínica se transforma en energía calorífica, consiguiendo una temperatura lo suficientemente alta para eliminar el bulbo piloso, sin dañar los tejidos circundantes, pero sí dañando las células germinativas responsables del crecimiento del pelo”, explica el experto.

    Ventajas e inconvenientes

    Entre las ventajas figuran las siguientes:

    • Es un sistema cómodo, rápido y prácticamente indoloro, que elimina el vello de forma sencilla y duradera.
    • Se puede realizar en cualquier parte del cuerpo, tanto de mujeres como de hombres. Las zonas más comunes son: piernas y muslos, brazos y axilas, región pubiana, línea media del abdomen, hombros y espalda, labio superior, etc. También está indicado en patologías de crecimiento anormal de los folículos pilosos (hipertricosis o hirsutismo).
    • Es una técnica que permite adaptar totalmente los parámetros de la máquina a las características del vello del paciente, por lo que su aplicación es siempre personalizada.
    • En la gran mayoría de los casos, el vello no vuelve a aparecer -según los expertos- pero reconocen que “cabe esta posibilidad, aunque es bastante remota”.
    • Su coste, aunque es bastante superior que cualquier otro tratamiento, puede no resultar elevado si se tiene cuenta la gran cantidad de productos que se ahorra una persona que ya no requiere depilarse semanalmente.
    • Es un método sencillo SIEMPRE llevado a cabo por un ESPECIALISTA por lo que su aplicación y resultados estarán continuamente controlados por un profesional médico cualificado.

    Respecto a los inconvenientes:

    • Elevado precio. Una depilación duradera sólo se consigue a través de varias sesiones, una media de tres a cinco, según la dureza del pelo.
    • Nunca deben someterse a tratamientos de estas características aquellas personas con pieles muy bronceadas, ni las mujeres embarazadas.

    Después de una sesión…

    • Conviene ducharse con un guante de crin
    • No tomar el sol o rayos UVA durante una semana
    • Aplicarse factor de protección total en la zona tratada
    • Aplicarse una crema hidratante, o en caso de irritación y molestias la que le recomienden en el centro.
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