La actividad sexual puede prevenir el cáncer de próstata en varones de edad avanzada

La frecuente eyaculación limpiaría los conductos del aparato sexual de sustancias carcinógenas, según un estudio
Por EROSKI Consumer 18 de julio de 2003

La actividad sexual frecuente de varones de entre 20 y 50 años, en una proporción de cinco veces por semana, puede tener un efecto preventivo sobre el desarrollo de cáncer de próstata en edades más avanzadas, según los resultados de un estudio realizado en Australia y publicado ayer en la revista británica «New Scientist».

El estudio se basa en la realización de cuestionarios a 1.079 pacientes que sufren la forma de cáncer más extendida entre los varones y a 1.259 personas sanas. El resultado de la comparación es que quienes más eyaculaciones han tenido entre los 20 y los 50 años tienen menos riesgo de desarrollar dicho cáncer y que esta posible protección es más acusada cuando las eyaculaciones se producen entre los 20 y 30 años. Cinco eyaculaciones por semana a esas edades, según el estudio, podrían reducir en un tercio la posibilidad de contraer un cáncer agresivo.

Los autores de la investigación pertenecen al Consejo del Cáncer Victoria, en Melbourne, y sus conclusiones se contradicen con otros estudios que indicaban que la promiscuidad y la frecuencia de relaciones sexuales con una pareja aumentan el riesgo del cáncer hasta un 40%.

Los autores señalan que esa contradicción puede deberse a que, en estudios estadísticos anteriores, se preguntó a los consultados sobre relaciones sexuales de pareja y no se les inquirió sobre eyaculaciones producto de la masturbación. Y que las infecciones contraídas en coitos de pareja serían un factor hasta ahora no tenido en cuenta.

Consideran también la posibilidad de que los varones encuestados mienten sobre sus hábitos sexuales, aunque advierten de que la cultura machista llevaría en todo caso a alardear de mayores relaciones sexuales que las mantenidas en la realidad y a reducir el número de masturbaciones declaradas. Esa suposición cultural fortalecería en todo caso los resultados del estudio.

Limpieza de los conductos

A la luz del análisis estadístico, los autores del informe especulan sobre las posibles razones y llegan a la conclusión de que la frecuente eyaculación limpiaría los conductos del aparato sexual y reproductivo de sustancias carcinógenas. La próstata segrega el fluido del semen.

La investigación tomó también en consideración aspectos como el número de parejas sexuales y los distintos contextos en los que se produce la eyaculación. Las conclusiones indican que las circunstancias en las que ésta se produce -sea durante el coito, por masturbación o durante el sueño-, no tienen ninguna repercusión en los resultados.

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