El 25% de la población infantil española requiere un tratamiento logopédico, aseguró ayer en Villareal (Castellón) la presidenta de la Asociación de Logopedas de España, María Teresa Estellés, durante la vigésimo segunda Reunión de Servicios de Otorrinolaringología de las Comunidades de Valencia, Murcia y Castilla La Mancha, que se celebra hasta mañana en el Hospital de La Plana de Villarreal y al que asisten cerca de 150 expertos.
La logopeda hizo hincapié en la importancia de acudir al otorrino «de modo inmediato si los padres han detectado que el niño no tiene nitidez o limpieza fonatoria». Una vez el otorrino ha detectado la disfonía, explicó, remite al menor a un centro o servicio de logopedia, donde se le educará la voz o se procederá a rehabilitación vocal.
La educación de la voz en la infancia «es importante, puesto que ésta es una cualidad adquirida y por ello debe ser aprehendida», explicó Estellés, quien agregó que esta educación fónica en la edad pediátrica «es fundamental para evitar patologías en la edad adulta como nódulos o edemas de Reinke (inflamación crónica de las cuerdas vocales)».
Por su parte, la doctora Marta Faubel, jefe del Servicio de Otorrinolaringología del Hospital de La Plana, señaló que actualmente se está experimentando un incremento de las disfonías en la infancia. «La importancia de su tratamiento es vital, puesto que hay que tener en cuenta que esta pequeña laringe se tiene que desarrollar y sufrir cambios hormonales, mucho más llamativos en el varón que en la mujer, debiendo procurar a los pacientes pediátricos el mejor cambio vocal para evitar patologías en la edad adulta», afirmó.
En los pacientes adultos también hay que tener en cuenta el llamado reflujo faringo-laringeo, patología hasta ahora poco conocida que en muchas ocasiones no presenta síntomas y que sólo a veces provoca tos o sensación de carraspeo. «Esta enfermedad puede ser una causa favorecedora de la aparición de edemas de Renke, nódulos pólipos u otras patologías», explicó Fabuel.
