La eficacia de los cócteles terapéuticos contra el sida sigue manteniéndose, según las conclusiones de una gran investigación europea publicada por la revista médica británica «The Lancet». Estos cócteles empezaron a utilizarse hacia 1996, produciendo una disminución espectacular de la mortalidad provocada por el VIH.
La incidencia (nuevos casos) de progresión de la enfermedad fue reducida casi a la mitad, en tanto que el riesgo de fallecimiento disminuyó en una proporción comparable (alrededor del 40%) desde que empezaron a utilizarse esos medicamentos.
En total, la investigación «EuroSIDA» siguió a 9.803 pacientes en 70 centros de Europa, así como en Argentina y en Israel. La elección de los pacientes se efectuó en tres fases: una anterior a la aparición de las triterapias (1994-1995), la de su introducción en el tratamiento de los pacientes (1996-1997) y un periodo correspondiente a la aparición de nuevas moléculas que enriquecieron el arsenal terapéutico antisida (1998-2000).
El número de muertes y de casos de progresión de la enfermedad a la fase de sida confirmado se reduce un 8% cada seis meses desde septiembre de 1998, afirman los autores del trabajo.
Sin embargo, como consecuencia de las combinaciones de moléculas antirretrovirales han aparecido también efectos secundarios y un cierto temor a que la capacidad de mutación del virus del sida vuelva a los medicamentos inoperantes.
Pero estos efectos secundarios a largo plazo «no han ensombrecido la eficacia» de los tratamientos, según los autores del estudio, pues el gran progreso inicialmente observado «se ha mantenido» de forma prolongada, subrayan.