La tasa de tuberculosis en España asciende a 30 casos por cada 100.000 habitantes, el doble que en Francia

Uno de los riesgos es el "cruce de infecciones" provocado por una mayor incidencia de VIH en nuestro país
Por EROSKI Consumer 24 de marzo de 2010

España registra una tasa de incidencia de la tuberculosis de 30 casos por cada 100.000 habitantes cada año, lo que supone el doble que en Francia y la mitad que en Marruecos. El doctor Joan Caylá, coordinador de la unidad de investigación en tuberculosis en Barcelona, ha dado a conocer estos datos en la mesa redonda «Por una respuesta eficaz, coherente y sostenible», organizada con motivo del Día Mundial de la Tuberculosis.

«Una de las causas de esta incidencia se debe a los cambios demográficos que sufre España, con la inmigración de países con altas tasas de tuberculosis como Rumania, Marruecos, Ecuador y China, que son los principales nacionalidades de inmigrantes», explicó el doctor. Además, en España hay mayores tasas de VIH que en estos países, por lo que en la actualidad «se da un cruce de infecciones», según afirmó Caylá.

Uno de los grandes problemas que conlleva esta enfermedad hoy en día es que está en proceso de convertirse en multirresistente, por lo que cada vez es más difícil curarla. Caylá destacó «la importancia de seguir de cerca los casos, saber si se curan y, sobre todo, que se registren, ya que la mitad de los casos diagnósticados no se registran». El doctor señaló que es necesario «implantar sistemas de vigilancia activa» sobre la mortalidad y las altas hospitalarias. Destacó el programa que lleva a cabo en Barcelona o el plan que se puso en marcha en Galicia, que «logró disminuir la incidencia de 76 casos por 100.000 en 2006 a los 30 ahora».

Caylá reclamó que la lucha contra esta enfermedad debe «convertirse en una prioridad política, como resalta la estrategia DOTS de la Organización Mundial de la Salud». Pidió por ello que se «impulse el plan para la prevención y control de la tuberculosis en España y que a su vez este impulso sea asumido también por las comunidades autónomas».

También intervino en la mesa redonda Peg Willingham, directora ejecutiva de Asuntos Externos de la Fundación Mundial Aereas para las vacunas de la tuberculosis, que explicó cuáles serán las herramientas necesarias para mejorar la respuesta global a esta enfermedad en el futuro. Willingham señaló que la vacuna más utilizada tiene ya 80 años, por lo que ha perdido eficacia, así como los fármacos que se usan en los tratamientos y los métodos de diagnóstico actuales, que sólo detectan el 20% de los casos cuando el paciente tiene sida, expuso. La representante de Aereas recalcó que «hay esperanza para el futuro en los nuevos fármacos, diagnósticos y vacunas que se desarrollan en la actualidad y que estarán disponibles en unos años».

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