Las mujeres españolas siguen siendo las más longevas de Europa, con una esperanza media de vida de 83 años, aunque llegan a la tercera edad en peores condiciones que el resto de las ciudadanas europeas, debido principalmente a que «se cuidan poco» a partir de la llegada de la madurez, y sobre todo desde los 65 años, según indicaron ayer varios expertos en salud durante la presentación del IV Encuentro Nacional de Salud y Medicina de la Mujer. Esta cita comienza hoy en Madrid con la participación de representantes de 24 sociedades médicas.
En concreto, el 57% de las españolas entre los 45 y los 64 años sufren enfermedades crónicas, y el 23% padece dolencias que son además incapacitantes, señaló el presidente de la Asociación Española para el Estudio de la Menopausia (AEEM), Santiago Palacios.
Al llegar a los 65 años, la prevalencia de las enfermedades crónicas aumenta, afectando al 80% de la población femenina, que en el 31% de los casos padece patologías discapacitantes. Además, la inmensa mayoría de las mujeres que las sufren viven solas.
Por otra parte, Palacios recordó que ya está confirmado que las mujeres presentan «diferencias de salud» con el hombre, que van más allá de las patologías relacionadas con el ámbito reproductivo.
Así, las mujeres sufren un 19% más de enfermedades cardiovasculares y dos o tres veces más depresiones que los varones. El 80% de los casos de osteoporosis y el 75% de las enfermedades autoinmunes se dan entre ellas. Además, suelen tener más problemas de sobrepeso, por lo que Palacios consideró que las españolas deben aumentar su ingesta de frutas y verduras.