Tener un hermano mellizo del sexo masculino puede suponer para una mujer una reducción del 25% en su fertilidad, según el hallazgo de investigadores de la Universidad de Sheffield, en el Reino Unido. Ello podría deberse a que durante el doble embarazo la niña se ve expuesta a las hormonas masculinas producidas por su hermano, según señalan los autores del estudio, publicado por la revista «PNAS».
Tanto la testosterona como los estrógenos atraviesan la placenta, lo que provoca que ambos fetos estén en contacto con las hormonas que produce el otro, explicó la doctora Virpi Lummaa. Mientras que el nivel de estrógenos de ambos es similar, por lo que el niño no se ve afectado, el exceso de hormona masculina podría ser perjudicial de cara a la posterior aparición, en la edad adulta, de enfermedades que comprometen la fertilidad de la mujer, entre ellas los cánceres del aparato reproductor, detalló la experta.
Para llevar a cabo este trabajo se analizaron los historiales médicos de la población finlandesa de 1734 a 1888. Así, tras examinar 754 casos de partos dobles, se determinó que las mujeres con un hermano mellizo varón tenían un 25% menos hijos que aquéllas con una hermana melliza. No obstante, serán necesarios más estudios experimentales en profundidad para determinar si la correlación estadística apuntada por Lummaa podría, en efecto, explicarse por un efecto perjudicial de la testosterona en el desarrollo de los órganos reproductores femeninos, señaló el doctor Laurence Shaw, portavoz de la Sociedad Británica de Fertilidad.
También experimentos en animales han mostrado el perjuicio que la hormona masculina ocasiona en la fertilidad de las hembras. Así, por ejemplo, la exposición a testosterona durante el embarazo en ovejas está relacionada con la aparición de una anomalía similar al síndrome de ovario policístico, que es una de las causas más abundantes de esterilidad en mujeres.