Tal como se desprende de un informe elaborado por la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) durante el segundo trimestre del año, la telefonía móvil está presente en el 74,1 por ciento de los hogares españoles, mientras que la penetración de la telefonía fija se eleva al 90,2 por ciento.
Según el estudio, sólo el 49 por ciento de la población utiliza el teléfono móvil en el hogar, un porcentaje que se mantiene estable respecto a trimestres anteriores. De los encuestados que no cuentan con un terminal móvil, el 3,2 por ciento tiene previsto contratar este servicio en los próximos seis meses.
El gasto medio mensual por cliente residencial asciende a 19 euros, aunque hay diferencias según se trate de modalidad de prepago o de postpago. En el primer caso, la media de gasto se mantiene cerca de los 16 euros al mes, mientras que en los usuarios residenciales con contratos se sitúa en torno a los 25 euros mensuales.
En cuanto a la posibilidad de sustituir los servicios de telefonía fija por los del servicio móvil, el 81,4 por ciento de los usuarios de telefonía celular considera que no son sustituibles, debido al elevado coste que suponen las llamadas desde un terminal y los problemas derivados de la cobertura.
Para el 83 por ciento de los hogares encuestados, el servicio de telefonía móvil es «bueno», mientras que el 10,9 por ciento considera que es «normal». Para el resto de los usuarios, la calidad del servicio es «mala».
El uso de la telefonía fija genera una factura media mensual de 47,1 euros, frente a los 44,2 euros estimados en el primer trimestre del año. Este gasto incluye tanto las cuotas mensuales de abono a la línea como las llamadas de acceso a Internet, por lo que este incremento puede deberse al aumento del tráfico con destino a Internet.
Por otra parte, el 24,6 por ciento de los contratos tiene un plan de descuento. En referencia al grado de conocimiento de las ofertas de operadoras alternativas por parte de los usuarios residenciales, la CMT se limita a señalar que «se aprecia un aumento con respecto a las encuestas anteriores».
El número medio de operadoras de telefonía fija en los hogares españoles es de 1,11. Además, el 9,3 por ciento de los hogares está preasignado a una compañía diferente a la que le proporciona el acceso telefónico.
La valoración de los servicios de telefonía fija es inferior a la del móvil. Así, el 65,6 por ciento de los hogares encuestados considera «bueno» este servicio y el 24 por ciento cree que su calidad es «normal», según la encuesta realizada por el regulador.
