Según explicó la edil de Turismo, el presidente de la Fundación presentó un informe en el que se recogen una serie de deficiencias que la ciudad de León padece de cara a la prestación y servicios para con los peregrinos.
Aspectos y carencias tales como la falta de instalaciones adecuadas para aquellas personas que realizan el Camino de Santiago a caballo y/o en carro, e incluso el peligro que supone para los caminantes la entrada a León por el cruce de la Ronda Sur. Reclamaciones presentadas por Areces y que se sumaron además a la solicitud de dotar a los albergues de peregrinos de instalaciones informáticas.
En este sentido, Travesí aseguró que la colaboración con esta fundación «tiene como fin el ofrecer unas mejores condiciones a los peregrinos, de tal forma que León no sea sólo una parada más en el camino de Santiago, sino que se consiga que estos visitantes vuelvan a la ciudad».
Por ello, la edil señaló que se mantendrán nuevos encuentros con la Fundación para fijar las acciones a realizar, a través de la comisión municipal que se encarga de la organización del Jacobeo 2004.