La Unión Europea (UE) aprobará a lo largo de este año el proyecto Urabin, impulsado por el Gobierno de Cantabria y que aprovecha el ganado autóctono para la prevención de los incendios forestales, un hecho pionero en España. El proyecto pretende salvaguardar los bosques y dar un nuevo uso a razas vacunas en peligro de extinción.
La Consejería de Desarrollo Rural, Ganadería, Pesca y Biodiversidad del Gobierno de Cantabria lidera esta iniciativa transnacional, en la que también participan la Universidad de Braganza (Portugal), el departamento de Aquitania (Francia) y la Diputación Provincial de Soria. Cada socio puede también tener una serie de asociados, entidades que participan en el proyecto mediante la aportación de sus conocimientos, asesoramiento, etc. Además, cada socio aportará un tipo de ganado vacuno, una «raza propia», que es la más representativa de la zona, que va a ser la herramienta de trabajo y que debe estar en peligro de extinción.
Este proyecto de cooperación territorial orientado a la recuperación de la biodiversidad de los paisajes silvopastorales del sudoeste europeo y al mantenimiento de razas de ganado en peligro puede contribuir en el caso de Cantabria a mejorar la lucha contra los incendios de invierno. La causa de estos fuegos suele ser la sequedad del terreno provocada por la quema de rastrojos y el viento sur dominante en esos meses.
Entre los asociados del Ejecutivo cántabro en este proyecto se encuentran SEO Bird Life, la Asociación Nacional de la Raza Tudanca, la Asociación Nacional de la Raza Monchina, la Agencia de Desarrollo Local de Torrelavega, el Grupo de Acción Local de Saja-Nansa y la Mancomunidad de Municipios Sostenibles.
El proyecto se enmarca, a su vez, dentro del programa europeo Interreg de colaboración entre las distintas regiones europeas, en concreto, dentro del Programa Operativo del Objetivo de Cooperación Territorial del Espacio Sudoeste Europeo (SUDOE) 2007-2013, del que forman parte España, Francia, Portugal y Reino Unido. El objetivo principal de este programa es consolidar el SUDOE como un Espacio de cooperación territorial en los ámbitos de la competitividad y la innovación, el medio ambiente, el desarrollo sostenible y la ordenación del territorio, que contribuya a reforzar la cohesión económica y social en el seno de la UE.
