Si se quiere teñir un mueble fabricado por uno mismo, se pueden emplear productos como la nogalina, muy utilizado si la madera que se va a tintar procede de un pino, u otros como el tinte acuoso o pinturas acrílicas al agua.
En el caso de la pintura acrílica al agua, se deberá rebajar lo suficiente como para que permita transparentar la madera, de modo que ésta pueda lucir su veteado natural. Para ver el resultado habrá que emplear la mezcla de pintura acrílica al agua sobre un trozo inservible de madera de las mismas características que la madera que se va a teñir, que permita apreciar el resultado final sin tener que hacerlo sobre el mueble que se haya construido.
Otra opción es emplear productos específicos, como barnices tinte, que permiten dejar visible la veta de la madera a la vez que la protegen frente a factores externos, algo muy importante si el mueble va a ser colocado a la intemperie.
