Vacunar contra la Tos Ferina

No es la vacuna más eficaz del mercado, pero ayuda mucho a reducir la incidencia de una enfermedad caracterizada por los accesos violentos de tos
Por EROSKI Consumer 20 de octubre de 2011
Img vacuna
Imagen: Stefanie L.

La Tos Ferina (también llamada tos convulsa o convulsiva) es una enfermedad infecciosa muy contagiosa, causada por el bacilo Bordetella pertussis. Esta infección respiratoria provoca unos accesos sofocantes de tos que se prolongan durante meses. Suele comenzar con una fase catarral y con tos irritante que, al cabo de una o dos semanas, se vuelve más exacerbada. Estos paroxismos se caracterizan por accesos repetidos y violentos de tos, sin inspiración intermedia. En los lactantes puede ocasionar también encefalitis y llegar a ser mortal. La Tos Ferina es una enfermedad endémica común en la infancia, en particular en las edades tempranas, y periódicamente se producen brotes.

Eficacia del 70% al 90%

La vacuna de célula completa contra la tos ferina (DTPe) se desarrolló en la década de 1930. El compuesto es una suspensión de células de Bordetella pertussis inactivadas con formalina. Según diversos estudios, tiene una eficacia preventiva que oscila entre 70% y el 90%. En cuanto a la vacuna Difteria-Tétanos-Tos Ferina acelular (DTPa), que contiene componentes inactivados y purificados de Bordetella pertussis, los estudios estiman una eficacia de entre el 71% y el 84%. Las cifras permiten ver que esta vacuna no es de las más eficaces; por eso, en España, más de 500 niños al año padecen tos ferina.

Más allá de las diferencias en los calendarios de vacunación, se suelen prever cinco dosis de esta vacuna: las cuatro primeras, a los 2, 4, 6 y 18 meses de edad, y la quinta a los 6 años de edad, junto con las vacunas antidiftérica y antitetánica. No obstante, y a diferencia de estas otras dos, la vacunación frente a tos ferina no está recomendada de forma rutinaria en mayores de 6 años.

Las reacciones adversas son, sobre todo, de tipo local. Suele aparecer enrojecimiento, inflamación, dolor o nódulos en el lugar de la inyección, principalmente tras la quinta dosis. También se pueden producir reacciones más importantes como: fiebre y llanto persistente. Las reacciones adversas son más frecuentes con la vacuna de células completas (DTPe) que con la pertussis acelular (DTPa).

La vacuna contra la tos ferina se administra junto con otras vacunas, ya sea en forma doble, DT y Td, triple DTPe o DTPa e incluso con cinco o seis antígenos. Su administración dentro del calendario suele coincidir con las vacunas frente a la poliomielitis, la hepatitis B, el haemophilus influenzae b y el meningococo tipo C.

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