En ocasiones, sobre el sustrato de algunos ejemplares se puede apreciar la presencia de cochinillas -que aparecen debido a un exceso de humedad provocado por excesos en el riego-, ciertos coleópteros, miriápodos, ciempiés o gusanos, entre otros insectos.
En general, esta vida animal puede llegar a destruir las raíces y hojas de los ejemplares, por lo que puede ser conveniente deshacerse a tiempo de ella. No obstante, este tipo de plagas no resultan dañinas en su totalidad, ya que ayudan a airear y abonar el sustrato sobre el que sobreviven y se desarrollan, sobre todo en el caso de que se trate de lombrices de color marrón.
Una forma muy común de apreciar su presencia consiste en vigilar los tiestos, tanto de jardín como interiores, aunque en estos últimos su presencia sea más difícil. Si aparecen pequeños montoncitos de tierra alrededor del tiesto será una señal inequívoca de la presencia de parásitos, cuyas heces sustituyen al sustrato del tiesto, que comienza a desbordarse poco a poco.
Si quiere eliminar su presencia deberá de emplear un producto especial contra todo tipo de insectos que se desarrollan en el suelo del jardín o en el sustrato de macetones, jardineras o macetas.
