Dar un nuevo aire a habitaciones infantiles o pequeños espacios un tanto sobrios es bien sencillo si optamos por la decoración con pintura transparente. Esta es una creativa y bonita solución en la que podemos involucrar a los más pequeños de la casa.
El material que necesitamos es únicamente una lámina de plástico transparente o un cristal y pintura transparente. Además hemos de elegir cuáles son los dibujos que vamos a elegir para convertir en pegatinas, tratando de que sean lo más sencillos posibles, sobre todo si hacemos este trabajo por primera vez.
Los pasos que debemos de dar son los siguientes:
1. Elegir un dibujo y colocar encima un cristal o una lámina de plástico para que en cierta manera calquemos el diseño. Sería conveniente fijar con celo el dibujo a la superficie de trabajo (el plástico o el cristal), para que no se nos mueva.
2. Coloreamos el dibujo utilizando para ello exclusivamente el propio bote de pintura. Éste dispone de un fino dosificador que sólo apretando aplicamos de una manera homogénea la propia pintura.
3. Esta pintura tarda aproximadamente 24 horas en secarse y será entonces cuando podamos retirar el dibujo del plástico o cristal.
Así, sin ningún tipo de adhesivo podremos colocar estas pegatinas sobre cualquier superficie lisa tantas veces como queramos.
