Pasos para realizar injertos en los cactus

Una de sus principales características es su gran resistencia a la sequía mediante la acumulación de agua y la reducción de su superficie; asimismo, tienen una tolerancia casi nula al exceso de humedad. Por esta razón, te recomendamos que, al tratarse de una especie que se desarrolla en climas muy áridos, riegues la planta sólo cada veinte días o una vez al mes. Muchas veces vemos en los viveros dos especies diferentes de cactus injertadas que forman una planta muy original. Para hacerlo hay que buscar ejemplares similares y seguir ciertos pasos. Corta con un cuchillo filoso la parte superior del cactus plantado en la maceta y al que quieras ponerle el injerto. Luego, corta la parte inferior del segundo cactus, sosteniéndolo con un papel para no pincharte. Es fundamental que ambas superficies sean de dimensiones similares. Por último, coloca el injerto sobre el cactus de la maceta y, una vez que esté centrado, sujetarlo con unas bandas elásticas para que se mantenga firme.