Siempre es aconsejable el cuidado de las herramientas bien para que los trabajos realizados tengan un mejor acabado y una más fácil ejecución o bien para ahorrarse el gasto que supone tener que hacerse con una herramienta nueva. En esta ocasión es recomendable seguir los siguientes consejos para tener las brocas de los taladros siempre a punto.
Tipos y modelos de brocas existen muchos y para cubrir diferentes funciones pero el mantenimiento es muy similar.
– en el caso de taladrar metales debe tenerse en cuenta utilizar las revoluciones adecuadas puesto que un mal uso puede provocar que las brocas se recalienten y emboten. Hay que tener en cuenta que cuanto más blando es el metal que haya que perforar y menor el orificio, mayor podrá ser el número de revoluciones al que se utilice el taladro.
– para prolongar la vida de todas las brocas, éstas deberán engrasarse periódicamente con aceite lubricante.
– cuando se realicen trabajos prolongados, es conveniente enfriar la broca. Lo más habitual es aplicarle un poco de agua, pero abusar de este recurso puede acabar mermando la capacidad de la broca. Por ello se recomienda dejarla reposar y contar con dos brocas iguales que utilicen alternativamente.
Con estas escuetas y prácticas recomendaciones se conseguirá alargar la vida de las brocas, además de lograr que éstas se encuentren siempre a punto para el trabajo.