El linóleo es un producto higiénico muy sencillo de limpiar, lo que le ha permitido adentrarse en el interior de nuestras viviendas como revestimiento de suelos; además, es muy barato y fácil de colocar.
Se trata de un material muy sólido ante el desgaste, soporta incluso las quemaduras de cigarrillos. Debido a su resistencia, también suele ser utilizado para forrar el exterior de algunos muebles, lo que se convierte en un problema si queremos restaurarlos o cambiarles de aspecto.
Si desea eliminar el acabado en linóleo deberá aplicarle aire caliente con la ayuda de una pistola de aire. Una vez que se haya ablandado el material podrá emplear una espátula para levantarlo, con mucho cuidado, procurando no rayar la superficie de la madera que recubre. Es mejor que lo caliente bastante, de esta forma facilitará el proceso de decapado y evitará arrancar pequeñas porciones de la madera mientras está retirando el linóleo.
Si el mueble también estaba pintado podrá retirar los restos de este elemento con gel decapante. Éste hará que la pintura se abombe, lo que hará más sencilla su retirada, ayudado de una espátula. Limpie el mueble con agua caliente.
Una vez retirada la pintura deberá comprobar si el mueble ha sido atacado por alguna plaga y actuar en consecuencia. También debe comprobar si la madera está deteriorada. Si hay partes rotas puede cortarlas y construir unas nuevas o bien rellenar o reparar los desperfectos con pasta de madera, comercial o casera, a base de serrín y cola de carpintero. También resulta conveniente comprobar la resistencia de las uniones entre las diferentes partes que conforman el mueble, reforzándolas con clavos de punta perdida y cola de carpintero si es necesario.
Una vez reparado el mueble podrá proceder a decorarlo. Es conveniente que elija un color que combine con el de los muebles circundantes. Deberá lijar la superficie del mueble, a poder ser en el sentido de la veta para evitar que la madera absorba el producto con el que vamos a decorarla, aplicarle una capa de tapaporos, una de imprimación y una o dos capas del color elegido.