Si el camino es estrecho y pegado a la vivienda, cuando lleve herramientas como la carretilla al jardín es posible que en ocasiones roce con las paredes o sus esquinas a la hora de realizar los giros, deteriorando el muro si el material no es demasiado resistente, como por ejemplo el ladrillo.
Para evitar estropear las esquinas lo que puede hacer es reforzarlas con unas planchas de metal en forma de ele. La altura de estas planchas dependerá de su gusto, simplemente puede protegerlas hasta media altura y pintar, hasta esa altura, los ladrillos, por ejemplo, de color rojo y el espacio existente entre ellos de color blanco, algo habitual en algunas construcciones. Para fijar la lámina de metal a la pared puede optar por emplear unos tornillos largos que le permitan obtener una unión duradera o un pegamento de contacto válido para los dos tipos de materiales que se vayan a unir.
También es factible proteger las esquinas del interior de la casa con madera, sobre todo si los niños pequeños puedan golpearse con ellas. La madera es un material mucho más blando que la propia pared, lo que convertirá la esquina en un obstáculo menos peligroso.
