La Eurocámara pide que los consumidores puedan cambiar de compañía energética en menos de un mes y sin costes

Advierte de que los precios de la electricidad y del gas deben ser "razonables, y transparentes"
Por EROSKI Consumer 20 de junio de 2008

Cualquier consumidor debería poder cambiar de suministrador energético en un plazo de un mes y sin coste alguno. Así lo dice un informe aprobado ayer por el Parlamento Europeo, que subraya que las compañías sólo deberían desconectar a sus clientes de la red como último recurso en caso de impago, especialmente si se trata de consumidores vulnerables, como ancianos o discapacitados. El informe señala además que los precios de la energía deben ser «razonables y transparentes».

La Eurocámara insta a los Estados miembros a garantizar que el consumidor pueda cambiar fácilmente de suministrador «sin cargo alguno y en un periodo no superior a un mes». Además, recuerda que el mercado europeo de la energía sigue caracterizándose por la existencia de un gran número de monopolios y considera que esto limita la libertad de elección y la posibilidad de cambiar de suministrador «rápida y gratuitamente».

Los eurodiputados solicitan a los Estados miembros que establezcan planes nacionales para hacer frente a la «pobreza energética» y comuniquen dichas medidas a la agencia europea reguladora. También ven necesario examinar en qué medida los distintos sistemas nacionales impositivos o de seguridad social tienen en cuenta los riesgos relacionados con la «pobreza energética».

Precios transparentes

Por otra parte, el informe recalca que los precios de la electricidad y del gas deben ser «razonables, fácil y claramente comparables y transparentes, y basarse en el consumo real de energía». Para lograr este objetivo, los eurodiputados proponen introducir simuladores de tarifas en las páginas de Internet de las compañías suministradoras y de los reguladores nacionales. Asimismo, consideran que los países de la UE deberían establecer una ventanilla única para toda solicitud de información de los usuarios.

En esta línea de transparencia, la Eurocámara solicita a los Estados miembros que financien la instalación de «contadores inteligentes» que ofrezcan a los consumidores «una información clara sobre su verdadero consumo de energía» y contribuyan así a una mayor eficiencia energética. También propone desarrollar un modelo de facturas tipo con información estandarizada para toda la UE.

Finalmente, el informe destaca que las autoridades reguladoras nacionales deberían supervisar los precios y proteger a los consumidores contra prácticas comerciales desleales.

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