La velocidad de escape de fuel de las grietas del «Prestige» ha experimentado una reducción notable, hasta el punto de que el vertido que fluye de la zona de popa del petrolero hundido se sitúa ahora en sólo una tonelada al día, lejos de las 80 toneladas diarias que ha llegado a expulsar. Así lo explicó ayer el vicepresidente primero del Gobierno, Mariano Rajoy, en la rueda de prensa habitual tras la reunión del Consejo de Ministros.
Rajoy dio cuenta de los trabajos efectuados por el batiscafo francés «Nautile» durante su última inmersión, que tuvo lugar el pasado jueves. El ministro de Presidencia también explicó lo acontecido en la última reunión del Comité Científico Asesor, que analizó los trabajos realizados por el «Nautile» hasta el día 15.
Ese análisis del Comité Científico concluye que en el petrolero hundido existen en la actualidad «once fugas obturadas, ocho totalmente, una casi totalmente y dos parcialmente». En la proa, según los datos aportados por Rajoy, están obturadas «todas las fugas menos una». El batiscafo no ha trabajado hasta el momento en esa grieta. En la zona de popa, en cambio, hay nueve fugas y sólo se ha taponado una.
El vicepresidente primero del Gobierno señaló que durante la inmersión del jueves sobre la zona de popa del barco hundido -que no se examinaba desde el pasado día 19 de diciembre-, el batiscafo constató «la eficacia de la obturación» de la única fuga cerrada hasta el momento.
Según Rajoy, el batiscafo pudo comprobar también la «notable reducción del flujo de escape» del conjunto de las fugas, lo cual «permite estimar el flujo en esta parte del pecio, es decir en popa, en un valor cercano a una tonelada al día», a falta todavía de algunos trabajos proyectados para la próxima inmersión y también de una evaluación posterior de las mismas.
Mariano Rajoy señaló que el batiscafo realizó el jueves pasado trabajos de obturación sobre «alguna fuga más». A partir de ahora, según las explicaciones del vicepresidente primero del Gobierno, el «Nautile» centrará su tarea en taponar el máximo número de grietas que hay en la popa, con material que ha sido trasladado al batiscafo en un helicóptero.
