Las aguas del Río Amarillo, el segundo más grande de China, han superado los índices de contaminación de Grado 5 -el peor de la escala- durante el primer semestre del año, según un informe de la Administración del Estado para la Protección del Medio Ambiente.
Dicho informe apunta que la disminución del caudal del río hasta un 32% del habitual, el más bajo de los últimos 50 años, debido a la fuerte sequía, ha deteriorado la calidad del agua en algunos tramos hasta niveles dramáticos.
De los siete ríos chinos más importantes analizados en el informe, el más limpio es el Río de la Perla, que mantiene la mayor parte de su curso un Grado 3, seguido del río Yangtsé, el más largo de China.
El Amarillo arrastra en su curso de 5.464 kilómetros una gran cantidad de sedimentos, incluidas las tierras arenosas del norte (el «loess», que tiñe de amarillo el agua), atraviesa ocho provincias y su cuenca es considerada el lugar donde nació la civilización china.