El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha asegurado que ninguna partida contaminada ha salido de la chatarrería gijonesa Daniel González Riestra S. L., donde se han localizado entre 150 y 200 toneladas de chatarra que emiten radiactividad por encima de los niveles permitidos. Fuentes de este organismo han informado de que la situación está «controlada» y garantizaron que la radiactividad no se ha extendido al aire ni al agua, y observaron que el montón de chatarra, que ocupa unos 40 metros cuadrados, se encuentra sobre una superficie asfáltica que no es permeable, por lo que no existe tampoco riesgo de que se contamine el suelo.
En la zona trabajan expertos de la Unidad Técnica de Protección Radiológica (UTPR) perteneciente a la empresa Proinsa, subcontratada por el CSN, y en las próximas horas se unirán también especialistas de la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa), que se harán cargo de la mercancía.
Los expertos que se encuentran en la chatarrería tratarán en las próximas horas de confinar el montón de chatarra cubriéndola con unas mantas especiales, que servirían para proteger la zona aunque cambiaran las condiciones climatológicas y se levantara viento o lloviera con intensidad.
Los niveles de radiactividad detectados en la instalación, aunque son altos y exceden los permitidos legalmente, no son «letales», según el CSN. La emisión radiactiva fue detectada por el pórtico situado a la entrada de la chatarrería cuando un camión ya cargado se disponía a abandonar la empresa.
Los trabajos de los expertos del CSN para determinar con exactitud las emisiones y adoptar todas las medidas necesarias para evitar que se disperse la contaminación, se prolongarán durante varios días, antes de que Enresa decida cómo gestionar y trasladar este material, en un proceso que será lento debido a la gran cantidad de chatarra almacenada.
