Ayer comenzaron las obras de emergencia programadas por el Ministerio de Medio Ambiente para regenerar las playas de la Costa del Sol, arrasadas por el temporal de Levante del pasado mes de marzo. En esta operación, sin precedentes en la costa española, se invertirán 10 millones de euros. Con estas actuaciones, 31 playas de los 14 municipios del litoral de Málaga recuperaran su anchura -algunas incluso ganarán terreno- y se construirá una barrera natural para evitar que próximos temporales tengan efectos graves.
Los primeros trabajos del plan empezaron ayer en la localidad de Nerja, donde varios camiones apilaron arena procedente de canteras en la playa de El Chucho, punto desde el que se repartirá en los próximos días a La Torrecilla. Esta obra, de la que dio cuenta en el Congreso de los Diputados la ministra de Medio Ambiente, Elvira Rodríguez, se enmarca en los aportes que se harán con áridos procedentes de canteras y de las ramblas y las desembocaduras de ríos (Vélez, Guadalhorce, Verde, Benamargosa, etc.).
Hoy ha comenzado el traslado de arena hasta las playas de Torrox, Algarrobo y Vélez-Málaga. La opción de los camiones se ha elegido para la parte oriental de Málaga, ya que ocasionará menos problemas de tráfico que en la costa oeste. Esta semana también se retirará el último de los nueve espigones con los que contaba La Rada, en Estepona, sustituidos por un único rompeolas paralelo a la costa.
La parte más llamativa y novedosa del plan de emergencia diseñado por Medio Ambiente será el uso de cuatro dragas, que empezarán a trabajar el lunes. Estos barcos succionarán la arena acumulada en las bocanas de entrada de ocho puertos de la provincia, que llega a dificultar enormemente la entrada de los buques, para depositarla posteriormente en las playas. Será la primera vez que tantas dragas trabajen al unísono en una regeneración del litoral.
