Con el cometido de estudiar si las playas españolas son adecuadas para restaurar la anidación de tortuga boba («Caretta caretta»), un equipo de científicos del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha trasladado 1.400 huevos de esta especie de reptiles desde Cabo Verde a Canarias y Andalucía, según informaron fuentes de la entidad científica.
La especie se encuentra en la actualidad «severamente amenazada en todo el planeta» y sufre alta mortalidad en Cabo Verde, donde reside la tercera población más importante del mundo, según los expertos. Un millar de esos huevos se han quedado en Canarias, mientras que 400 se han enviado a Andalucía, donde 150 se han depositado en incubadoras de la Estación Biológica de Doñana, en Sevilla, y 250 se han colocado en nidos de arena en playas vírgenes del Parque Natural de Cabo de Gata, en Almería.
«Si la restauración de la especie es viable en España se plantearía la traída de huevos durante al menos 10 años, así como la liberación de tortuguitas en playas españolas para que retornen a las playas de nacimiento tras su maduración, dentro de 10 ó 20 años. De esta forma consolidarían una anidación estable en el litoral español», explicó Adolfo Marco, investigador del CSIC participante en el proyecto.
La técnica de restauración de anidación se ha ensayado con éxito en Estados Unidos con huevos de tortuga lora procedentes de México. Además, gracias al seguimiento mediante emisores de ultrasonidos y por satélite, el desarrollo de este estudio permitirá profundizar en el conocimiento de la importancia de la información magnética terrestre en la orientación de las tortugas bobas y en el comportamiento de navegación de los ejemplares jóvenes.