El Real Automóvil Club de España (RACE) ha reclamado al Gobierno que obligue a las mujeres embarazadas a utilizar el cinturón de seguridad. Según el informe «Embarazo y cinturón» basado en las amplias investigaciones realizadas por la Universidad de Michigan, no pueden descartarse daños en la placenta o el feto en aquellas embarazadas que utilizan el cinturón, pero la mayoría de las lesiones se producen en gestantes que no lo llevaban puesto en el momento del accidente.
El informe del RACE aconseja colocarse la banda inferior por debajo de la barriga y ajustarse al máximo el cinturón sobre las caderas. La banda diagonal debe pasar sobre la clavícula y en medio de los senos, rodeando al vientre. Jamás por encima de él. En la nueva normativa solo se eximiría el uso del cinturón en determinados casos siempre por recomendación médica.
Los accidentes de tráfico producen cada año entre 200 y 700 interrupciones de embarazo en España. No llevar cinturón aumenta exponencialmente las posibilidades de muerte para el conductor o los ocupantes. Y para que el feto sobreviva, la primera premisa es que lo haga la madre.