El Departamento de Sanidad del Gobierno Vasco ha suspendido cautelarmente la actividad del Hotel Balneario de Orduña tras la aparición de cuatro casos de legionelosis. Las autoridades sanitarias investigan el origen de la infección de los cuatro enfermos, todos ellos clientes del citado centro termal vizcaíno.
Los afectados, tres hombres y una mujer con edades comprendidas entre los 36 y 55 años, permanecen ingresados en planta en dos centros hospitalarios, aunque su evolución es favorable.
Dada la concurrencia y simultaneidad de estos casos, Sanidad ha procedido a la suspensión cautelar de actividades del establecimiento termal, a excepción de la cafetería y restaurante, para prevenir la posible exposición de nuevos usuarios. El propio balneario ha hecho suya esta recomendación hasta que se determine el foco que dio origen a los casos.
Los servicios de vigilancia epidemiológica tuvieron conocimiento el pasado viernes del primer caso, activándose el protocolo de actuación establecido al respecto. Se pusieron en contacto con los responsables del balneario, quienes en todo momento han mostrado su disposición para colaborar en las labores pertinentes, desde las de investigación hasta las correspondientes a la desinfección si se demuestra que efectivamente el foco se localiza en las instalaciones.
Una vez terminada la investigación, y en cuanto los resultados de los estudios analíticos lo permitan, se procederá al levantamiento de la suspensión de actividades del centro termal.
Según Inclán, el origen de la infección parece que está en el balneario, aunque «todavía es una probabilidad» derivada del hecho de que los afectados tienen el antecedente común de haber estado en el hotel.
El consejero ha destacado que su departamento ha tomado muestras de todas las áreas de riesgo del centro y ha llevado a cabo un «tratamiento intensivo para erradicar la legionela, en el caso de que estuviera presente».
