Las coberturas vacunales frente a enfermedades como la gripe o el sarampión, rubéola y parotiditis (vacuna triple vírica) han disminuido en los últimos años. Una situación preocupante, «ya que puede dar lugar a bolsas de población con escasa protección y al rebrote de alguna de estas patologías», alertaron los responsables de salud pública de Madrid, Castilla y León y País Vasco durante el curso de Verano de la Fundación de la Universidad Rey Juan Carlos «Vacunación del adulto en el siglo XXI», organizado por el Grupo de Estudio de Vacunación en el Adulto (GEsVA).
Estos especialistas mostraron su preocupación por la falta de concienciación sobre la importancia de la vacunación que existe en la sociedad y recomendaron alcanzar las máximas coberturas de inmunización posibles.
Durante su intervención en el curso, el director general de Salud Pública e Investigación, Desarrollo e Innovación de la Junta de Castilla y León, Javier Castrodeza, recordó que «la vacunación es una medida preventiva que podría acabar con muchas enfermedades infecciosas», al tiempo que señaló cómo la sociedad ha adoptado adoptando «la falsa creencia de que la batalla a las enfermedades infecciosas está ganada».
Para la directora general de Atención Primaria del Servicio Madrileño de Salud, Patricia Flores, aumentar la cobertura vacunal permite que «nuestro Sistema de Salud sea más eficiente y, por tanto, más sostenible, algo especialmente importante ante la coyuntura económica que vivimos». Por eso, lo apuntó, junto con el incremento en el calendario del número de vacunas, como uno de los dos retos de las políticas de vacunación.
Otro aspecto en el que también coincidieron en destacar es la importancia del registro vacunal. En este sentido, el miembro del GEsVA y catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad Rey Juan Carlos, el profesor Ángel Gil, afirmó que «al igual que en la infancia, durante la edad adulta, se debería mantener una cartilla de vacunación en la que quedara constancia de las vacunas y dosis administradas».
Gripe estacional
Respecto a la gripe estacional, el coordinador de GEsVA, el profesor Ramón Cisterna, señaló durante la celebración del curso que este otoño es prioritario asegurar la vacunación frente a este virus, especialmente en los grupos más vulnerables, como son los niños, mayores y enfermos. Cisterna recordó que la vacuna incluirá tres cepas, de la cuales una será la causante de la gripe A (H1N1).
El coordinador de GEsVA dijo que la experiencia con estas vacunas «nos ha demostrado que son fiables, seguras y eficaces, por eso debemos recuperar la confianza de la población en la vacuna frente a la gripe estacional y lograr una cobertura óptima».
En España la tasa de cobertura en la población general es muy baja, sólo entre el 25% y el 30% de los adultos se vacuna frente a la gripe estacional. Aunque en la población mayor de 65 años el porcentaje aumenta hasta el 65%.
El codirector del curso, miembro del GEsVA y jefe de Servicio de Neumología del Hospital General Yagüe (Burgos), José Luis Viejo Bañuelos, indicó que la vacuna está recomendada para «todas las personas que quieran evitar la gripe». Esto permitiría no sólo la protección individual frente al virus, sino que además, al impedir la diseminación del mismo, «constituye un beneficio para la sociedad».
