Investigadores del Vall d’Hebron Institut de Recerca (VHIR) de Barcelona han descrito, por primera vez, alteraciones moleculares en el síndrome del intestino irritable. El VHIR considera que este hallazgo «cambia radicalmente la visión que se tenía hasta ahora de una enfermedad considerada funcional y sin traducción biológica, por la visión de una entidad con alteraciones biológicas subyacentes a nivel del intestino». También destaca que permitirá mejorar el diagnóstico y personalizar los tratamientos según las necesidades específicas de cada paciente.
El síndrome del intestino irritable (conocido también como colon irritable) es la enfermedad gastrointestinal más frecuente en clínica en el mundo occidental. Afecta, de media, al 15% de la población adulta y representa, según los especialistas, ente el 1% y 2% de todo el gasto sanitario.
El VHIR señala que la descripción inicial de una alteración orgánica del síndrome del intestino irritable puede suponer una base sobre la cual identificar dianas diagnósticas y terapéuticas específicas de la enfermedad y, de esta manera, poder desarrollar marcadores útiles para el diagnóstico positivo y nuevas herramientas de tratamiento dirigidas al núcleo del problema. A medio plazo, «este hallazgo va a suponer un gran avance respecto a los tratamientos sintomáticos que se usan en la actualidad», añade.
«Todos los datos hallados desde que empezamos a estudiar esta enfermedad, han ido dando forma a un nuevo enfoque diagnóstico. Hasta ahora, el diagnóstico se sustentaba, fundamentalmente, en la naturaleza crónica de los síntomas sin la existencia de signos evidentes de enfermedad orgánica», puntualizó el Dr. Javier Santos, responsable del estudio, publicado en el «American Journal of Gastroenterology» y destacado por «Nature Reviews Gastroenterology & Hepatology».