Un total de 12 millones de gafas de sol se vendieron en España el año pasado, de las cuales el 70%, distribuidas en mercadillos, bazares o «top manta», no pasó ningún control de calidad, ni óptico ni sanitario, aseguró ayer el Colegio Nacional de Ópticos-Optometristas, que alertó del riesgo de utilizar este tipo de lentes no homologadas.
Los optometristas recordaron que las gafas de sol homologadas, que protegen de la excesiva luz solar y de los rayos ultravioleta, se venden exclusivamente en centros autorizados, por lo que recomendaron prestar atención a la marca «CE» que hace referencia al estándar mínimo de calidad; exigir que las lentes tengan especificado el número de categoría de filtro (que va del 0 al 5 en función de su capacidad de absorción de la luz), y asegurarse de que tienen filtros para la radiación solar.
Los ópticos recomiendan su adquisición en establecimientos autorizados
Entre los riesgos de usar gafas sin homologar, estos expertos destacaron graves trastornos oculares, como conjuntivitis, queratitis, edemas en los párpados, escamaciones del endotelio corneal e incluso cataratas prematuras. «Existen además determinados casos en los que se exige una mayor protección, como personas con degeneración macular, principio de cataratas, retinosis pigmentaria, albinismo, intervenidos quirúrgicamente de cataratas y afectados por fotofobia (hipersensibilidad a la luz)», advirtieron.
Finalmente, aconsejaron prestar especial atención a los niños, ya que «sus ojos no están totalmente desarrollados, por ello las radiaciones ultravioletas les afectan más». «Aproximadamente el 80% de la invasión de la radiación ultravioleta en el interior del ojo se produce durante los primeros 18 años de vida, por lo que hasta esa edad los niños deben protegerse con una gafa de sol adecuada, que absorba el 100% de la radiación».
En verano, mayor protección
En verano, debido a la mayor exposición al sol, al agua de playas, ríos y pantanos y el cambio de ambiente provoca entre un 10% y un 20% más de patologías oculares asociadas a estos factores.
Los expertos avisan también de que exponerse a las radiaciones solares sin protección y durante varias horas puede ser causa directa de la aparición precoz de cataratas. Además, es muy probable que también produzca otro tipo de enfermedades oculares como afecciones corneales, de la retina o de la conjuntiva.
De igual forma, si nos bañamos en aguas de piscina poco cloradas, en ríos no muy limpios, en zonas de costa no aptas para el baño o en pantanos contaminados, pueden aparecer patologías oculares como conjuntivitis de inclusión provocadas por virus y bacterias.
