El 80% de los casos de cáncer de piel se debe al abuso del sol

Tres de cada cuatro españoles no se protege adecuadamente durante los meses de verano
Por EROSKI Consumer 21 de julio de 2002

Los españoles no hacen buen uso del sol. Desconocen cuáles son las reglas básicas para broncearse sin riesgos y, por tanto, no se protegen adecuadamente. Así lo demuestra el Estudio de Sensibilización Solar, elaborado por la Asociación Española de Cáncer Cutáneo, los colegios oficiales de farmaceúticos y los laboratorios Vichy, que revela que, a pesar de que el sol es la primera causa de aparición de lesiones cancerosas en la piel, tres de cada cuatro españoles abusan de él durante los meses de verano. Así, a pesar de que el 65% de los españoles tiene la piel clara, sólo el 15% utiliza un índice de protección igual o superior a 35, según exigen las características de este tipo de piel.

Las personas más adictas al sol son las mujeres trabajadoras de clase media que rondan los treinta años y, las que peor se protegen, por comunidades autónomas, las castellanas y madrileñas, que abusan del sol durante las vacaciones de verano con la intención de broncearse en un tiempo récord. Quemaduras, ampollas, enrojecimiento de la piel, fotoenvejecimiento y aparición de pecas son algunas de las consecuencias más frecuentes; pero son las secuelas a largo plazo el verdadero peligro que genera una inadecuada exposición al sol.

«Además de producir efectos agudos de carácter pigmentario, la luz solar puede provocar manifestaciones de carácter crónico», señala el doctor García Muñoz, dermatólogo y presidente del Colegio de Médicos de Valladolid. Estas consecuencias nefastas no son provocadas por la acción inmediata de la luz sino que son producidas por la acumulación de los rayos solares, después de muchos años de exposición. «Son irreversibles y acumulativas», añade el doctor García Muñoz, quien asegura que, debido a la moda del bronceado, estas manifestaciones, que hasta hace unos años aparecían en personas de edad avanzada, las padece cada día gente más joven.

La cantidad de sol que admite el cuerpo es limitada y la piel tiene muy buena memoria. Según la Organización Mundial de la Salud, cada año se detectan en el mundo dos nuevos millones de casos de cáncer cutáneo. «Los daños se van almacenando en la epidermis de forma progresiva e inapreciable a simple vista; sin embargo, sus consecuencias a medio y largo plazo son irremediables», señala el Estudio de Sensibilización Solar.

Los niños son la población de mayor riesgo. Un tercio de la radiación solar se recibe durante la infancia y, según un informe del XXIX Congreso Nacional de Dermatología, el 80% de los casos de cáncer de piel se debe a una excesiva exposición al sol durante la infancia y la adolescencia. El estudio de la Asociación Española de Cáncer Cutáneo demuestra que dos o más quemaduras intensas antes de los diez años multiplica el riesgo de desarrollar un cáncer en la edad adulta. «Las lesiones cutáneas que se generan durante la infancia tienen sus consecuencias a partir de los cincuenta años», asevera el presidente del Colegio de Médicos de Valladolid.

El uso de una protección adecuada durante los primeros años de exposición al sol reduciría el riesgo de desarrollar cáncer de piel durante la edad adulta en un 78%, según el Colegio Oficial de Farmaceúticos. Para ello, los especialistas recomiendan, entre otras pautas para exponerse al sol de forma racional, utilizar protectores solares que defiendan tanto de la radiación UVB como UVA y adecuar el índice de protección en función del tipo de piel.

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube