España es el país de la Unión Europea en el que se vende un mayor número de medicamentos sin prescripción, sobre todo antibióticos, según especialistas médicos que presentaron ayer un documento sobre las resistencias bacterianas en el mundo. El jefe del servicio de Microbiología del hospital Ramón y Cajal de Madrid, Fernando Baquero, señaló en conferencia de prensa que los españoles consumen más antibióticos de los necesarios y que ello provoca que se creen resistencias bacterianas.
En el mundo circulan ya cepas de bacterias que se llaman «españolas» porque desde aquí se han desplazado al resto del mundo, una situación que preocupa a los científicos y que supone una carrera entre la industria y los microbios. El problema lo inscribe Baquero en una situación ecológica natural que selecciona de una forma «darwinista» a los más débiles.
En el sur de Europa se consumen más medicamentos que en el norte y además en España hay más farmacias por habitantes que en otros países, lo que unido a la automedicación y a la venta sin receta médica es lo que ha hecho que España se encuentre en las más altas tasas de consumo y resistencia a los antibióticos.
