La hipertrofia del corazón es la causa más habitual de muerte súbita cardiaca en países mediterráneos, según una investigación

En cambio, los infartos son más frecuentes en los países del norte de Europa y Estados Unidos
Por EROSKI Consumer 17 de julio de 2004

Según revela el «Proyecto Eulalia», elaborado por el Instituto de Medicina Legal de Cataluña, el Hospital de Sant Pau de Barcelona y el Instituto Nacional de Toxicología junto con los centros de medicina legal de Murcia, Andalucía y Navarra, la hipertrofia del corazón, es decir, tener este órgano más grande de lo normal, es la causa más frecuente de muerte súbita de origen cardiaco entre los adultos de países mediterráneos.

La investigación, que se inició hace tres años, muestra cómo «en Estados Unidos y los países del norte de Europa, el 80 o el 90% de las muertes súbitas de origen cardiaco están relacionadas con cardiopatías isquémicas o enfermedades de las arterias coronarias, que generan infartos de miocardio o anginas de pecho». En cambio, en los países mediterráneos, donde se producen menos infartos, es la hipertrofia del ventrículo izquierdo, que bombea la sangre, el factor clave. Según el director del Instituto de Cardiología del Hospital de Sant Pau, un 47% de los 180 casos estudiados por el «Proyecto Eulalia» se asocian a cardiopatías isquémicas y de ellos, sólo la mitad se relacionan a un infarto agudo.

Para el especialista, esta menor presencia de enfermedades coronarias en los países latinos puede hallar respuesta en la «cultura mediterránea». «No sólo es la dieta, sino también una forma de vida más alegre y saludable», donde tienen cabida el deporte, la siesta y un menor hábito tabáquico, según el doctor. Y es que en la investigación, las víctimas analizadas son, en su mayoría, hombres, fumadores, con una elevada hipertensión, sin un historial clínico anterior y que murieron en su hogar mientras descansaban.

Por ello, los expertos proponen controlar de forma habitual la presión arterial, ya que la hipertensión es un factor desencadenante de la mayor parte de casos de hipertrofia del corazón y por tanto, de muerte súbita. El estudio, que es provisional hasta que alcance un número de 400 casos analizados, pone de relieve la necesidad de que la población se responsabilice del control de la presión arterial alta.

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