La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, dependiente del Ministerio de Sanidad y Consumo, considera que existe «uso abusivo» de la hormona del crecimiento en personas sanas, sobre todo con fines no autorizados y perjudiciales para la salud, como aumentar el rendimiento físico y para prevenir o retardar el envejecimiento en adultos sanos.
Con el fin de evitar ese mal uso y para proteger la sanidad pública, Sanidad ha decidido cambiar el régimen de autorización de los fármacos con hormona del crecimiento. A partir de ahora, los medicamentos con hormona del crecimiento sólo podrán ser dispensados por los servicios de farmacia de los hospitales públicos o privados y servicios de farmacia habilitados al efecto por las consejerías de Sanidad de cada una de las comunidades autónomas. Asimismo, se insta a los pacientes a que se pongan en contacto con su médico con objeto de conocer los cambios en la dispensación de estas especialidades farmacéuticas.
Esta hormona está autorizada en España para el tratamiento de diversas enfermedades ligadas a un déficit de la misma o bien para pacientes con retrasos en el crecimiento de otra índole para los que se ha demostrado su eficacia y seguridad. Desde la Agencia se subraya que los efectos atribuidos a la hormona del crecimiento se circunscriben a la respuesta observada en pacientes que presentan una deficiencia hormonal previa y que es incorrecto suponer que personas con niveles normales de secreción hormonal se benefician de su uso.
