Un 70% de médicos de cabecera ha cometido algún error importante, según un estudio

Los fallos principales son los efectos secundarios de los fármacos o el retraso en el diagnóstico de una enfermedad grave
Por EROSKI Consumer 25 de noviembre de 2006

El 70% de los médicos de cabecera reconoce haber cometido algún error clínico importante a lo largo de su ejercicio profesional, lo que ha llevado al 7% de ellos a plantearse dejar la profesión, según un estudio elaborado por la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (SEMFYC).

El estudio, elaborado a partir de 238 encuestas a médicos de atención primaria de Cataluña con una media de catorce años de experiencia, revela que sólo un tercio de los facultativos (28%) afirma no haber cometido ningún error médico, una cifra de la que la SEMFYC recela, pues cree que, en realidad, podría ser menor.

De hecho, el estudio revela que un 61% de los médicos ha recibido alguna reclamación por parte de sus pacientes, en su mayoría de tipo oral, durante el último año, y que un 4% tiene una causa judicial abierta debida, principalmente, a los errores clínicos cometidos y a una mala comunicación con el enfermo.

Respecto a los fallos médicos, los especialistas afirman que un 37% de ellos vienen originados por problemas derivados de los efectos secundarios de los fármacos y un 33% por el retraso en el diagnóstico ante la sospecha de una enfermedad grave.

Ante la pregunta de qué factores pueden influir en el error, los encuestados eluden el _mea culpa_ al argumentar sobre todo la falta de tiempo por la presión asistencial existente, seguida por la mala organización y el escaso apoyo a la formación continuada.

Ante un error clínico, la reacción más frecuente del médico, que reconoce vivir en muchos casos una situación ansioso depresiva, es contactar con el paciente (80%) y comentar el caso con el equipo (41%), con amigos (33%) y con la propia familia (20%). El estudio indica también que las áreas en las que los profesionales se sienten más seguros son la dermatología, la otorrinolaringología y la atención al paciente terminal.

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