Un total de 391 niños de Chernobil (Ucrania) llegarán este año al País Vasco para pasar el verano lejos de la radioactividad que todavía afecta a la zona de influencia de la central nuclear. El objetivo es que su cuerpo regenere las defensas.
Esta iniciativa la promueve desde hace años la asociación Chernobil. Marian Izagirre, una de las responsables de la entidad en Guipúzcoa, explica que «la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha constatado que con 40 días que estos niños salgan del ambiente de radioactividad, su cuerpo regenera defensas para combatir las enfermedades a las que son propensos».
Desde el 25 de junio hasta el 28 de agosto, los menores descansarán con familias vascas. «Cinco personas de la asociación viajaremos a Ucrania unos días antes para ultimar los detalles del viaje y para explicarles que su estancia aquí, aunque para ellos sean unas vacaciones, se debe a un motivo de salud y no sólo a una cuestión de jugar y de recibir regalos», indica Marian.
Durante la estancia, la asociación tiene preparadas más de una veintena de actividades conjuntas, en las que las familias acogedoras, sobre todo las nuevas, pueden consultar sus dudas e intercambiar sus experiencias sobre el proceso de adaptación.
