El Consejo de Ministros aprobó ayer el Plan de Derechos Humanos, que «da respuesta al compromiso del Gobierno con la promoción y la defensa de los derechos fundamentales en nuestro país», dijo la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega. En total, recoge 172 compromisos.
El documento, en cuya elaboración han participado ocho ministerios y diversas ONG e institutos universitarios de derechos humanos, se vertebra en torno a la igualdad, la no discriminación y la integración de las personas, y las garantías que protegen los derechos humanos.
En virtud de este plan se dará cumplimiento a los compromisos sobre cooperación al desarrollo, y en especial a los Objetivos del Milenio, a los que se destinará, al menos, un 50% de la ayuda española al desarrollo.
El plan compromete además al Gobierno en la lucha contra la violencia de género con campañas de información y sensibilización permanentes, así como en la protección de los refugiados, y contempla la aprobación de un proyecto de reforma de la Ley Orgánica de Libertad Religiosa.
Asimismo, recoge medidas, en colaboración con las comunidades autónomas y los ayuntamientos, para fortalecer la cohesión en prestaciones de educación, vivienda, sanidad, servicios sociales básicos, condiciones laborales, prestaciones a dependientes y protección de los derechos de la infancia.
Se reconoce también el derecho de todo ciudadano a disfrutar de un medio ambiente adecuado, promoviendo medidas para minimizar el impacto de la actividad humana en el territorio y para mejorar la calidad del medio ambiente en los núcleos urbanos.
