Las autoridades españolas creen que Etiopía debería actuar cautelarmente para impedir que las niñas que declararon haber sido víctimas de abusos sexuales por parte del director de la ONG Global Infantil, Gil Lossada, sigan conviviendo con él en el centro que la organización gestiona a 30 kilómetros de Addis Abeba. No obstante, de las respuestas del Gobierno etíope no parece deducirse una actuación inmediata.
Al parecer, hace cuatro años Lossada fue denunciado por una familia y la investigación se vio paralizada debido a las buenas relaciones entre el acusado y los mandatarios locales. Las acusaciones actuales vienen avaladas por la toma en consideración de la justicia española y son muy graves. En esta ocasión, desde el país africano se ha anunciado que se tomarán medidas.
A la querella de Tomás Juver y Petra García, dos cooperantes, se han unido ahora otros testimonios. Los abusos y malos tratos que presuntamente ejercía Gil Lossada en el centro de Global Infantil eran «vox populi» entre los voluntarios de otras organizaciones en la capital etiope. Los primeros casos de maltrato, según los testimonios aportados a la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) y a las autoridades judiciales españolas, se habrían cometido en 2003, año en que la ONG inauguró la escuela.
La AECI considera «improcedente» que el director de la ONG se mantenga al frente del centro
El secretario general de la AECI, Juan Pablo de Laiglesia, manifestó que considera «absolutamente improcedente» que el director de la ONG se mantenga al frente del centro a pesar de las acusaciones que pesan sobre él, «pero es una decisión que deberá tomar la propia organización», añadió.
No empañar la labor humanitaria
El hecho de que se haya puesto en entredicho el comportamiento del responsable de Global Infantil se suma a malversaciones de fondos y otros escándalos que han salpicado últimamente a otras ONG. Este es el motivo por el que la AECI y la Coordinadora de ONG para el Desarrollo recuerdan la profesionalidad y la ética en las actuaciones de la gran mayoría de las organizaciones que trabajan por el desarrollo. También se ha vuelto a recordar la importancia de contar con códigos éticos y de conducta que establezcan mecanismos de transparencia y control en las entidades.
En cualquier caso, desde todos los ámbitos se coincide en que, independientemente de la decisión judicial que se derive del caso contra Gil Lossada, se debería asegurar la continuidad de los proyectos que esta ONG tiene en marcha, siempre que respeten los códigos éticos y se introduzcan las medidas correctoras necesarias.
Reacción de Global Infantil
La ONG Global Infantil agradece en su web a «todos los asociados, amigos y conocidos, cooperantes, voluntarios» su apoyo y les comunica «que en estos momentos hay ofrecidos mas de 220.000 euros para subsanar la devolución de los fondos de la AECI». «Quienes pretendían parara el proyecto y perjudicar a los niños se han equivocado y lo peor continúan equivocándose. Nosotros seguimos trabajando y construyendo, ya estamos cerrando el edificio. Las dificultades y sobre toda las originadas por la calumnia y la mentira, lejos de distorsionarnos, lo único que están consiguiendo es que estemos mas unidos que nunca y lo continuaremos estando», añade la nota.
En declaraciones a medios de comunicación, Gil Lossada desmintió tajantemente las acusaciones y las tildó de «imputaciones tan calumniosas como del todo falsas».
