Luchar contra la pobreza infantil, proteger a los niños y niñas frente a la violencia, cuidar su salud mental, garantizar para todos y todas una educación inclusiva y de calidad, promover los derechos de la infancia también en el ámbito digital o asegurar que vivan en entornos limpios y saludables son algunos de los aspectos que se pueden tener en cuenta a la hora de votar pensando en los niños y las niñas.
¿Por qué debemos tenerlos en cuenta?
Los niños, niñas y adolescentes representan el 18 % de la población a nivel estatal. Son titulares de derechos y el cumplimiento de los mismos implica la necesidad de mejorar leyes y políticas públicas.
Asimismo, son el segmento de la sociedad más vulnerable a la pobreza, la violencia y la explotación, y al desarrollar a tiempo las políticas e inversiones necesarias se reducen posibles vulneraciones de sus derechos, con el consecuente ahorro económico y social a futuro.
Porque invertir en infancia es una opción económicamente rentable con beneficios para toda la población: promueve el desarrollo al aumentar la productividad, el crecimiento económico y los niveles de cohesión social.
Ejes para situar a la infancia y adolescencia en el centro
Los cinco ejes estratégicos para situar a la infancia y la adolescencia en el centro de las decisiones a nivel local y autonómico son:
- Valorar, respetar y tratar justamente a cada niño y niña, con especial atención a los colectivos más vulnerables, como los niños, niñas y adolescentes en movimiento, refugiados y víctimas de trata, fortaleciendo los mecanismos de respuesta, atención, protección e inclusión social
- Tener en cuenta las voces de cada niño, niña y adolescente en las decisiones que les afectan y fomentar la participación infantil y adolescente en los municipios. “Queremos espacios de participación de calidad donde la infancia y la adolescencia se sienta escuchada de verdad. No se trata de crear órganos de participación porque sí, sino asegurar que funcionan y se mantienen” aseguran las y los jóvenes que forman parte del grupo asesor de UNICEF España.
- Garantizar el acceso a servicios básicos de calidad a todos los niños y niñas. Cuando hoy en España el 32,2 % de los niños y niñas viven en riesgo de pobreza o exclusión social, no podemos mirar para otro lado. Las entidades locales, especialmente desde una labor preventiva, juegan un rol clave en la configuración de espacios y la dotación de servicios que fomenten la vida activa en la infancia, la alimentación saludable, la salud física, la educación de calidad, el deporte, el juego y el ocio.
- Garantizar entornos seguros y limpios para todos los niños, niñas y adolescentes. ¿Qué es un entorno seguro? Aquel que respete los derechos de la infancia y promueva un ambiente protector físico, psicológico y social, incluido el entorno digital, tal y como nos indica la Ley Orgánica de Protección Integral a la Infancia y la Adolescencia frente a la Violencia (LOPIVI).
- Es necesario un compromiso con los niños, niñas y adolescentes a nivel global y mecanismos de gobernanza de la política local de infancia. Es decir, fomentar la acción local comprometida con los derechos de la infancia y el desarrollo sostenible aquí y en el mundo, y establecer una estrategia coordinada a largo plazo poniendo a la infancia y adolescencia en el centro para conseguir transformaciones en la calidad de vida y el bienestar de todas las personas.
En este contexto, la campaña #MueveTuFicha anima a la ciudadanía a compartir e informarse sobre las propuestas de UNICEF España, a leer los programas electorales en clave de infancia y a movilizarse en favor de los niños, niñas y adolescentes.
Todas las personas tenemos la opción de mover ficha en favor de los derechos de la infancia en las próximas elecciones y tratar de poner en valor la importancia de trabajar desde lo local y autonómico en favor de los derechos de niños, niñas y adolescentes.