El presidente del Comité Español del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Francisco González-Bueno, ha pedido hoy a los gobiernos de los países desarrollados un compromiso real y efectivo para la defensa de los derechos de los niños en el próximo decenio. González-Bueno presentó esta mañana el contexto en el que se celebrará la Sesión Especial sobre la Infancia el próximo 8 de mayo en Nueva York. En este encuentro tomarán parte 73 jefes de Estado y de Gobierno y delegaciones de todos los países integrados en Naciones Unidas.
Esta reunión se produce doce años después de la Cumbre Mundial de la Infancia, que aprobó un Plan de Acción cuyos objetivos han sido desiguales e insatisfactoriamente cumplidos, afirmó el presidente del Comité Español, al tiempo que subrayaba la necesidad de crear una opinión pública mundial que anime a los Gobiernos a cumplir con sus compromisos. En este sentido, explicó que el documento que se aprobará en la sesión, «Nosotros los niños y las niñas» que será presentado por el secretario general de la ONU, Koffi Annan, está consensuado en un 86%.
Los objetivos básicos de este encuentro tienen que centrarse, según comentó, en garantizar las mejores condiciones de vida posibles para la población de 0 a 23 años, consolidar una educación básica de calidad, especialmente para las niñas, y fomentar la participación de los menores en las decisiones que les afectan. Además, debe haber un compromiso para lograr erradicar la pobreza, que afecta a 600 millones de niños, añadió.
González-Bueno también hizo un recordatorio de los objetivos de la Cumbre de 1990 incumplidos. Así, apuntó que sólo se ha logrado reducir un 14% la mortalidad infantil cuando se acordó una disminución de un tercio. También se marcó el objetivo de rebajar a la mitad la tasa de desnutrición y sólo ha descendido un 17%. Tampoco se ha logrado el acceso universal al agua potable ni un acceso total a la escolarización, agregó. No obstante, precisó que la situación de los menores es mucho mejor ahora que hace 10 año, aunque persisten lacras inaceptables.
La situación de los menores en España es mejor que en la de muchos países en desarrollo, aunque persiste también vulneración de derechos, según el informe sobre la situación de la infancia que cada país tiene que realizar cada cinco años. Así, se estima que 175.000 menores realizan actividades productivas durante más de tres horas, lo que, a pesar de estar escolarizados, vulnera su derecho al ocio y obstaculiza el acceso a la educación superior.
Según el director de comunicación de Unicef, Juan José Ortiz, en nuestro país todavía persisten riesgos que pueden llevar a problemas más graves, como la situación de los menores no acompañados, los malos tratos físicos y psíquicos, y la explotación sexual de menores inmigrantes. En cualquier caso, el derecho más vulnerado en los países desarrollados es la participación de los niños en las decisiones que les afectan.
Por eso, en la Sesión Especial de la ONU se ha querido hacer énfasis en este derecho contemplado en la Convención, permitiendo a dos menores, en representación de todos los niños del mundo, participar en el plenario de la Asamblea para exponer sus preocupaciones. Para ello, Naciones Unidas ha tenido que suspender una de sus resoluciones que prohíbe la participación de menores.
En abril de 2001, España acogió un Foro con niñas y niños de todo el país en el que se aprobó un manifiesto que pide: garantizar y promover los derechos de supervivencia, protección y desarrollo; proteger la igualdad de oportunidades y la no discriminación; y garantizar el derecho de participación de los menores.
